En declaraciones a Cazador de Noticias, el funcionario confirmó que ninguna de las larvas recolectadas hasta mediados de enero “responde a las características morfológicas del aedes aegypti, transmisor del dengue y la fiebre amarilla”.

De todos modos, Murdocca volvió a instar a la población para que tome conciencia del peligro, en virtud de la cantidad de falencias que se perciben diariamente en las calles. “Podríamos estar toda una mañana enumerándolas”, se quejó.

En ese sentido, recordó que esta especie pone sus huevos en el interior de recipientes pequeños y medianos donde se haya acumulado agua. “Por ende, es preciso disminuir la cantidad de cubiertas al aire libre, deschatarrar las viviendas y extraer los floreros de los cementerios”, exigió.

Al finalizar, consultado por la proliferación de los clásicos mosquitos, Murdocca respondió: “la humedad, el calor y la lluvia componen el cóctel explosivo por excelencia”.

No obstante, aclaró: “hemos tenido un crecimiento disperso en nuestro Partido, que es más que normal para esta época. Por lo tanto, no podemos hablar de una situación inusitada y sí podemos asegurar que estamos preparados para hacerles frente”.