Hoy se cumple un nuevo aniversario, el trigésimo, de la desaparición de Oscar Smith, quien desde 1974 era Secretario General del Sindicato Luz y Fuerza de Capital Federal, cuando ese gremio combatía y negociaba para no ser despojado de las mejoras laborales logradas en muchas horas de lucha y en no pocas mesas de reunión paritaria.

El conflicto entonces, era contra SEGBA, presidido por una dura intervención militar, y tenía que ver con la primera huelga que un gremio le hacía a la dictadura instalada once meses y algunos días antes.

Cortar ese movimiento de fuerza, “esa salvaje indisciplina”, como se decía en aquel tiempo, era una decisión del gobierno de facto, para evitar que “el mal”, se trasladase a otros gremios privados de sus conquistas, llamadas privilegios, en el entonces lenguaje oficial.

¿Fue ese el motivo de la desaparición del gremialista? Esta pregunta aún no tiene respuesta.
Hoy Oscar Smith es recordado no sólo entre los lucifuercistas sino en todo el movimiento obrero organizado, como un símbolo y una bandera de la militancia sindical.