Al respecto, Castello precisó que “durante el año 2003 Fares llegóal partido de la mano de Hernán Lombardi y colaboró activamente en las elecciones provinciales de septiembre de ese año, pero no ha tenido el privilegio de estar afiliado a Recrear, no ha sido dirigente del partido, ni mucho menos candidato por nuestro espacio”.

Agregó luego que “en Recrear somos muy estrictos con el ingreso de nuevos afiliados, a los cuales se les ha exigido siempre tres cosas: una cierta consistencia ideológica, un convencimiento real de la necesidad de restablecer la República, las instituciones y el funcionamiento normal de los partidos políticos y sobre todo, el compromiso militante de librar una lucha sin cuartel contra la corrupción en el gobierno”.

Respecto del primer punto, el dirigente de Recrear manifestó su preocupación por el “travestismo” que exhibe actualmente la gran mayoría de los políticos en nuestro país: “la clase política argentina ha demostrado últimamente una falta total de escrúpulos a la hora de elegir un partido político al cual representar, razón por la cual a la ciudadanía le cuesta distinguir si los políticos tienen una gran confusión en sus ideas o simplemente los motiva un inconfesable oportunismo electoral”, afirmó.

Agregó que “es imprescindible que fortalezcamos los partidos políticos, y para ello , lo primero que hay que hacer es permitir el funcionamiento institucional de los mismos, comenzando por el ejercicio de la democracia interna en la selección de sus candidatos”, por lo cual criticó “la nefasta metodología de elegir los candidatos a dedo por encima de la voluntad de los afiliados, procedimiento que viene aplicando sin ningún tipo de vergüenza todo el peronismo en el país, desde Néstor Kirchner con su esposa Cristina, hasta Daniel Katz, con su secretario de Deportes, Sergio Fares”.

Para finalizar, el referente lopezmurphysta manifestó que “en Recrear Mar del Plata creemos que para luchar eficazmente contra la corrupción en el gobierno hay que empezar por modernizar el Estado Municipal, asegurando la independencia de los organismos de control e incorporando herramientas para darle mayor transparencia a los sistemas de compras y de asignación de subsidios; jerarquizar la función publica separando la burocracia estable del poder político de turno a través de nombramientos por concurso y de un sistema de gestión por resultados que incorpore premios y castigos, todos mecanismos anticorrupción que han sido totalmente ignorados por el actual Intendente, y que, seguramente, no serán tomados en cuenta seriamente por su delfín, en caso de continuar con el gobierno municipal.”