Cazador de
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Miércoles - 10 de Octubre de 2007 09:07Por Gustavo Demarchi, abogado
Al revés sale mal
Los argentinos, respecto del idioma, tenemos un comportamiento peculiar que llega al extremo de otorgarle a los vocablos un sentido exactamente inverso al que la lengua española le ha conferido...
Resulta común escuchar, e incluso leer, que cuando una situación ha superado su temperatura normal es “álgida” y este adjetivo calificativo expresa, exactamente, lo contrario: muy frío, glacial.
De igual manera, cuando se esta en presencia de alguien nervioso, es dable oir que esa persona se ha “enervado” cuando esta expresión denota lo opuesto: sin vigor, sin nervios.
También integra esta nada apreciable “galería” de incorrecciones la adjudicación del género femenino a un hombre que ha logrado una formación o arte específico, sin la asistencia de terceros docentes . Se le dice normalmente que es “autodidacta” cuando, salvo alguna desviación travestista que indique lo contrario, lo correcto es denominarlo o calificarlo como autodidacto.
Esta actitud anómala no se agota en el uso del idioma doméstico; muy por el contrario lo ha excedido y constituye un motivo de preocupación la extensión, de esta suerte corruptela idiomática, a campos más sustanciales como la política y la economía.
Es lo que se podría definir como una manía por lo inconducente o una vocación enfermiza por la hipocresía, ya sea que el primer caso se arbitren medios totalmente improcedentes para el fin perseguido (ignorancia) o que deliberadamente se haga exactamente lo contrario a los postulados esgrimidos (mala fe).
Hipólito Yrigoyen respecto del primer caso acuñó una de las frases que mejor reflejó tanto el vicio como el remedio, dijo ante una situación similar a la presente que “es hora de dedicarse a las efectividades conducentes”.
Esta necesaria correlación entre los medios y los fines por la que clamaba el “peludo” resulta de singular vigencia para terminar con esta práctica de la “contradicción sistemática” que abarca, no sólo lo idiomático ya expresado, sino que parece ser una práctica habitual en la política y en la economía.
Resulta revelador que el gobierno en lugar de bajar el elevado gasto público aumenta los impuestos y crea retenciones expropiatorias con lo cual se desalientan las inversiones y se provoca inflación.
Frente a ello el gobierno K en lugar de asumir el error y enmendarlo no tiene mejor idea que falsear los índices, resultado: más desconfianza y más inflación acumulada.
Se despotrica contra la década el 90 al mismo tiempo que se panfletea a la opinión pública con las recaudaciones records y el supéravit fiscal ocultando que: la primera se debe a que casi el 40% de la misma deriva de los impuestos que ahora pagan las empresas privatizadas en los noventa y el segundo, el superavit, sería utópico sin esos impuestos a lo que se debería agregar el financiamiento con los recursos generales y corrientes los enormes déficits que esas empresas en manos del estado generaron, y generan (Ej. ENARSA ,LAPSA ,ETC).
Este ambiguo mensaje impide que se vislumbren medidas conducentes tendientes a la solución del retraso tecnológico y energético y de ser, dramáticamente, “soja dependiente” como se caracteriza a la economía (algún nombre hay que ponerle) K, situación que “amenaza” continuar con la Kónyuge (un poco más de deformación idiomática parece ser necesario).
Así el kirchnerismo incurre en una práctica que ya ha demostrado, no sólo su inutilidad, sino que coadyuva al agravamiento de la pobreza y al estancamiento social como son las posturas asistencialistas.
En lugar de promover políticas de crecimiento económico el “kaismo”, en diferentes niveles parece empeñado en un retorno al encorsetamiento, las regulaciones, el estatismo, el aislacionismo y el corporativismo que agravan el atraso estructural.
Hay signos concretos de estas posturas inconducentes cuando se impiden inversiones millonarias que hubieran traído, al menos un paliativo a la grave situación de pobreza que agobia al país.
Aristóteles, en un supuesto diálogo con Alejandro, le manifestó que “..en una sociedad republicana no es una vergüenza ser humilde y pobre, sino no hacer nada para mejorar la situación!”. Que diría el genio griego si viera que aquí, además, se hace lo contrario!!
La incongruencia de medidas antidesarrollo que se instrumentan por quienes lo único que hacen crecer es el gasto público, por iniciativa de quienes viven de él, trae a la memoria de muchos lo que Jauretche calificaba como una zoncera relevante: esa actitud de “ir a comprar al almacén con el manual que había escrito el almacenero“.
En definitiva se toman los caminos exactamente contrarios al fin propuesto, como acontece en las deformaciones idiomáticas expuestas.
En definitiva la pregunta que debemos formularnos no es tanto si se han tomado medidas contra los males que hoy aquejan a la República, sino si esas medidas son conducentes a la solución de los problemas o si, por el contrario, son sólo la confirmación de un accionar contraproducente e hipócrita para beneficio de pocos y mal de muchos .
Jauretche decía que “descubrir las zonceras que llevamos adentro es un acto de liberación” a lo que cabe agregar que eliminarlas y no repetirlas en la Argentina actual es una necesidad vital.
Aclaración: la opinión de los columnistas no siempre coincide con el pensamiento de la Dirección General.
De igual manera, cuando se esta en presencia de alguien nervioso, es dable oir que esa persona se ha “enervado” cuando esta expresión denota lo opuesto: sin vigor, sin nervios.
También integra esta nada apreciable “galería” de incorrecciones la adjudicación del género femenino a un hombre que ha logrado una formación o arte específico, sin la asistencia de terceros docentes . Se le dice normalmente que es “autodidacta” cuando, salvo alguna desviación travestista que indique lo contrario, lo correcto es denominarlo o calificarlo como autodidacto.
Esta actitud anómala no se agota en el uso del idioma doméstico; muy por el contrario lo ha excedido y constituye un motivo de preocupación la extensión, de esta suerte corruptela idiomática, a campos más sustanciales como la política y la economía.
Es lo que se podría definir como una manía por lo inconducente o una vocación enfermiza por la hipocresía, ya sea que el primer caso se arbitren medios totalmente improcedentes para el fin perseguido (ignorancia) o que deliberadamente se haga exactamente lo contrario a los postulados esgrimidos (mala fe).
Hipólito Yrigoyen respecto del primer caso acuñó una de las frases que mejor reflejó tanto el vicio como el remedio, dijo ante una situación similar a la presente que “es hora de dedicarse a las efectividades conducentes”.
Esta necesaria correlación entre los medios y los fines por la que clamaba el “peludo” resulta de singular vigencia para terminar con esta práctica de la “contradicción sistemática” que abarca, no sólo lo idiomático ya expresado, sino que parece ser una práctica habitual en la política y en la economía.
Resulta revelador que el gobierno en lugar de bajar el elevado gasto público aumenta los impuestos y crea retenciones expropiatorias con lo cual se desalientan las inversiones y se provoca inflación.
Frente a ello el gobierno K en lugar de asumir el error y enmendarlo no tiene mejor idea que falsear los índices, resultado: más desconfianza y más inflación acumulada.
Se despotrica contra la década el 90 al mismo tiempo que se panfletea a la opinión pública con las recaudaciones records y el supéravit fiscal ocultando que: la primera se debe a que casi el 40% de la misma deriva de los impuestos que ahora pagan las empresas privatizadas en los noventa y el segundo, el superavit, sería utópico sin esos impuestos a lo que se debería agregar el financiamiento con los recursos generales y corrientes los enormes déficits que esas empresas en manos del estado generaron, y generan (Ej. ENARSA ,LAPSA ,ETC).
Este ambiguo mensaje impide que se vislumbren medidas conducentes tendientes a la solución del retraso tecnológico y energético y de ser, dramáticamente, “soja dependiente” como se caracteriza a la economía (algún nombre hay que ponerle) K, situación que “amenaza” continuar con la Kónyuge (un poco más de deformación idiomática parece ser necesario).
Así el kirchnerismo incurre en una práctica que ya ha demostrado, no sólo su inutilidad, sino que coadyuva al agravamiento de la pobreza y al estancamiento social como son las posturas asistencialistas.
En lugar de promover políticas de crecimiento económico el “kaismo”, en diferentes niveles parece empeñado en un retorno al encorsetamiento, las regulaciones, el estatismo, el aislacionismo y el corporativismo que agravan el atraso estructural.
Hay signos concretos de estas posturas inconducentes cuando se impiden inversiones millonarias que hubieran traído, al menos un paliativo a la grave situación de pobreza que agobia al país.
Aristóteles, en un supuesto diálogo con Alejandro, le manifestó que “..en una sociedad republicana no es una vergüenza ser humilde y pobre, sino no hacer nada para mejorar la situación!”. Que diría el genio griego si viera que aquí, además, se hace lo contrario!!
La incongruencia de medidas antidesarrollo que se instrumentan por quienes lo único que hacen crecer es el gasto público, por iniciativa de quienes viven de él, trae a la memoria de muchos lo que Jauretche calificaba como una zoncera relevante: esa actitud de “ir a comprar al almacén con el manual que había escrito el almacenero“.
En definitiva se toman los caminos exactamente contrarios al fin propuesto, como acontece en las deformaciones idiomáticas expuestas.
En definitiva la pregunta que debemos formularnos no es tanto si se han tomado medidas contra los males que hoy aquejan a la República, sino si esas medidas son conducentes a la solución de los problemas o si, por el contrario, son sólo la confirmación de un accionar contraproducente e hipócrita para beneficio de pocos y mal de muchos .
Jauretche decía que “descubrir las zonceras que llevamos adentro es un acto de liberación” a lo que cabe agregar que eliminarlas y no repetirlas en la Argentina actual es una necesidad vital.
Aclaración: la opinión de los columnistas no siempre coincide con el pensamiento de la Dirección General.
Efemérides - 10 de Octubre
Día de la Industria Aeronáutica
Día de San Daniel
Día del Industrial Panadero
Día Mundial contra la Pena de Muerte
Día Mundial de la Salud Mental
Día Mundial de la Visión
Día Nacional de la Danza
Día Nacional del Técnico
1813Nace el compositor, Giuseppe Verdi
1867Felipe Varela toma la ciudad de Salta
1888Nace en Buenos Aires, Teodoro Bronzini, ex intendente de General Pueyrredon
1902Nace en el barrio porteño de La Boca el músico Pedro Laurenz
1918Nace el músico y compositor, Santos Lipesker
1926Nace el bailarín, “Virulazo”. Cuyo verdadero nombre era Joaquín Martín Orcaizaguirre
1962Fundación de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo
1962Fundación de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales
1963Arturo Humberto Illia asume la Presidencia de la Nación
1968Fallece el poeta, Mario Battistella. Nacido como Mario Z. Bastes Stella
1971Un accidente de aviación provocó la muerte de nueve bailarines pertenecientes al elenco estable del Teatro Colón
1986Muere el escritor, Antonio Di Benedetto
1987Fundación del Centro de Residentes Chubutenses en MDP
1997Cae en Fray Bentos un avión de la línea Austral
2004Muere el actor, Christopher Reeve
2009Muere el cantante, Luis Aguilé
2009Se promulga la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual
2017Con 3 goles de Messi Argentina clasificó a Rusia 2018
2018El gobierno del ex presidente Mauricio Macri da marcha atrás con el aumento retroactivo del gas en 24 cuotas
2019El "día que nacieron de nuevo", los movileros Néstor Gambini(LU6) y Beto Mena(Brisas) en la esquina de Balcarce y 14 de Julio
2019Loma Negra cierra la primera fábrica de cemento del país, ubicada en Sierras Bayas
2019Murió el periodista de espectáculos, José "Pepe" Benhayón
2020El empresario Jorge Neuss asesinó a su esposa y luego se suicidó
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