A raíz del incidente, el delantero debió abandonar el entrenamiento y dirigirse a una clínica marplatense para darse las vacunas correspondientes. Hasta tuvo que realizar la denuncia ante la Policía, luego de identificar a los dueños del ovejero alemán agresor.

“No tiene nada, no tiene nada”, le manifestaron los dueños del canino a los efectivos policiales, mientras el delantero describía la increíble situación vivida esta mañana.

En tanto, el resto del plantel completó sus tareas físicas en el segundo turno de entrenamientos bajo las órdenes del entrenador, Pedro Troglio, quien continúa a la espera de la llegada del colombiano Freddy Grisales como refuerzo.

Fuente: Télam