Hasta hace no tanto tiempo, las vacaciones de verano eran asociadas al tiempo libre con familia o amigos, la playa, el descanso. Ahora las cosas son bien distintas. El verano pasó a ser para los jóvenes el momento de mayor descontrol, incluso sin tomar en cuenta las consecuencias.
En lo que va de la temporada, el 62 por ciento de los pacientes asistidos por intoxicación alcohólica en hospitales de la Costa Atlántica fueron mujeres adolescentes menores de 25 años, según informó hoy el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires.
El relevamiento, hecho por la Subsecretaría de Atención a las Adicciones de la cartera sanitaria provincial, determinó que del total de casos asistidos por consumo de drogas y alcohol -271-, el 16 por ciento- correspondió a menores de 18 años, de los cuales más de la mitad eran mujeres.
Se debieron atender seis casos de coma alcohólico, cinco de ellos protagonizados por chicas menores de 20 años: una de 16 años en Villa Gesell, otra de 17 y dos de 19 en Pinamar, y una última de 19 en Mar de Ajó.
Un cambio peligroso
La titular de la Subsecretaría de Atención a las Adicciones bonaerense, María Graciela García, explicó que este aumento de intoxicación alcohólica entre las jóvenes “puede deberse a que las adolescentes son más proclives a la consulta, porque se asustan más rápido y piden ayuda”.
“Por otro lado, vemos que en los últimos años se acercaron más a prácticas que antes eran mayormente masculinas; me refiero a probar nuevas sustancias y combinaciones para conocer sus efectos, hechos que pueden derivar en cócteles explosivos”, agregó la especialista.
Para García, esta situación “se lee en el nivel de vulnerabilidad existente entre las chicas”, porque “están perdiendo la conciencia de los riesgos que significa experimentar con sustancias psicoactivas”.
No obstante, si se toman las cifras totales de personas atendidas, incluidas todas las edades, los varones asistidos siguen a la cabeza, con el 61,5 por ciento de los casos.
El Ministerio de Salud bonaerense dispuso a principios de temporada el refuerzo de guardias en las ciudades más visitadas por grupos de jóvenes y adolescentes como Pinamar, Mar de Ajó, Mar del Plata, Miramar, Necochea y Villa Gesell.
Desde la Subsecretaría de Adicciones detallaron que la sustancia tóxica que más consultas motivó fue el alcohol, ya sea sola o mezclada con otras como cocaína, psicofármacos, marihuana y bebidas energizantes.
García contó que “en los casos extremos contactamos a las familias y sugerimos un seguimiento dentro de la red provincial de asistencia a las adicciones, pero el problema se da cuando vienen acompañados por amigos, que es lo más frecuente”.
La funcionaria especificó que durante este verano se asignaron a las guardias de los hospitales unos 18 profesionales por quincena especializados en adicciones.
Fuente: NA.