Lula y Evo Morales rechazaron una propuesta que había hecho Cristina Kirchner
La cumbre del gas en Olivos no sirvió para alcanzar un acuerdo energético. La presidenta Cristina Kirchner recibió ayer sonriente a sus pares de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, y de Bolivia, Evo Morales, pero en la reunión tripartita no pudieron encontrar una solución para garantizar el suficiente suministro de gas natural a nuestro país y alejar el peligro de faltante en el próximo invierno.
Multitudinaria, tensa y ardua. Así fue la cumbre energética: en más de dos horas y media se reveló que nada estaba convenido de antemano.
El único acuerdo consistió en que los ministros de Energía de la Argentina, Brasil y Bolivia conformarán un grupo coordinador para buscar “las mejores alternativas” de corto y de largo plazo para garantizar el suministro. Se reunirá por primera vez en La Paz, dentro de unos diez días. No hay fecha aún.
La Argentina hizo una oferta módica, pero fue rechazada. Según confiaron luego los funcionarios brasileños, Cristina Kirchner pidió que Brasil le cediera un millón de metros cúbicos de gas por día de los 30 millones que importa ese país de Bolivia, para garantizar el abastecimiento de la demanda interna en el invierno. “Gas no”, dijo Lula da Silva. Sólo ofreció exportar 200 megavatios de energía eléctrica por hora, lo cual equivale a aquel millón de metros cúbicos de gas en el potencial energético.
Se cumplió así lo que había anticipado el canciller brasileño Celos Amorim. Brasil usará todo el gas que recibe de Bolivia, pero cedería electricidad. Y Evo Morales reiteró ayer lo que su gobierno adelantó hace diez días: no puede aumentar el suministro a Brasil y a la Argentina en el próximo invierno por falta de inversiones para extraer gas.
Como única alternativa, había propuesto que estos países se lo redistribuyeran. Y Brasil no cedió y así se desvaneció la única esperanza que tenía la Casa Rosada.
La Argentina importa de Bolivia algo más de 3 millones de metros cúbicos diarios, pero debería recibir 7,7 millones, según en el contrato vigente y para evitar una crisis. Brasil defiende sus 30 millones diarios porque también lo tiene garantizado por convenio. El presidente de la petrolera brasileña Petrobras, Sergio Gabrielli, dijo anteayer que no renunciaría “a una sola molécula de gas”. Y lo confirmó en Olivos.
Pocas explicaciones
El grupo coordinador que se reunirá en La Paz dentro de diez días estará integrado por los ministros de Planificación, Julio De Vido; de Minas y Energía de Brasil, Edson Lobao, y de Hidrocarburos de Bolivia, Carlos Villegas.
El canciller Jorge Taiana leyó en Olivos un escueto comunicado que indicó que ese grupo “deberá analizar la evolución de las respectivas demandas de energía y coordinar las medidas que considere oportunas”. Se evaluarán, dijo, “las mejores alternativas para el crecimiento de la producción y de las infraestructuras para que el sector energético pueda acompañar el crecimiento de las economías”.
En el aeroparque Jorge Newbery hablaron los visitantes. Villegas dijo que en La Paz “se va a ver el tema estructural, y el tema coyuntural de suministro en picos de demanda”.
Consultado sobre el volumen garantizado, señaló que “no se garantizó ninguno”.
Con un pie en el avión, Lula habló. “Después de tanto tiempo sin inversiones en Bolivia, comenzó a haber inversiones de Petrobras y del propio gobierno boliviano. A mediano plazo, Bolivia podrá atender las demandas de Argentina y Brasil y no tendremos problema”, dijo.
“La energía no es sólo producida por gas. Lo importante es tener una cantidad importante de megavatios para los países que necesitan de Brasil, como Uruguay y la Argentina. A veces necesitamos de la Argentina; por eso una política de solidaridad es extremadamente importante”, dijo Lula.
Lobao informó en el Aeroparque que, en Olivos, la parte argentina, con la presidenta Cristina Kirchner a la cabeza, había pedido “aumentar un millón de metros cúbicos más de gas por día y que lo ceda Brasil”. O sea, elevar el flujo de 3 a 4 millones.
“Brasil no va a proveer gas, ofreció 200 megavatios por hora para colaborar”, dijo Lobao. El asesor principal de Lula, Marco Aurelio García, dijo que el grupo coordinador “ideará un mecanismo de solidaridad energética” y relató, en forma enigmática, que Evo Morales admitió al final del encuentro su país “tiene más gas del que se suponía”. Pero no para exportarlo.
Fuente: La Nación