El Sindicato Único de Peones de Taxis de Mar del Plata, desea hacer público su total rechazo a las palabras del concejal Walter Malagutti quien ha vertido en una gacetilla de prensa, conceptos falaces e ignominiosos, en otro desesperado intento por llamar la atención y justificar su sueldo.

Nos parece vergonzoso que un espécimen de tal calaña, exija coherencia, cuando lo único ‘coherente’ que a sabido hacer es “chuparle las medias” a los integrantes del Clan Katz-Pagni.

Este resabio de la política nefasta que sumergió a la ciudad en la situación que hoy se intenta revertir, no tiene la altura moral ni la capacidad, para exigirle nada a nadie. Ya que es parte del partido que gobernó durante 20 de los últimos 25 años, la ciudad. Y que la llevó a su peor estado en todos los ámbitos y aspectos posibles.

Debería, el concejal Malagutti, demostrar un mínimo grado de humildad y realizar la auto crítica que la ciudadanía marplatense les exigió el pasado 28 de octubre al otorgarles un tímido 14 % de los votos. Antes de disparar críticas a una gestión que, por primera vez en muchos años, intenta gobernar con sentido común y teniendo en cuenta las necesidades sentidas de la población.

Tendría, este concejal, que refrescar su memoria, para no olvidar que el titular de la Dirección de Transporte y Tránsito que designo “su” intendente y amigo, Daniel Katz, fue el nefasto, incompetente, ignorante y de sospechosa moral, Ángel Fernández. A quien se le atribuye la peor gestión en la historia de la dependencia que le tocara dirigir.

Estamos cansados de este tipo de personajes que no hacen más que poner “palos en la rueda” para intentar retrasar y obstaculizar el reordenamiento que la ciudad y sus vecinos necesitamos.

Póngase a trabajar en serio que para eso le pagamos el sueldo, aporte soluciones comprometidas con lo que el pueblo marplatense requiere y, deje de intentar figurar en los medios a través de conductas más propias de vedettes, que de un profesor y concejal.

Donato Cirone
Secretario General S.U.Pe.Tax.

(La opinión de los columnistas no siempre coincide con el pensamiento de la Dirección General)