El campo argentino ha proclamado una tregua de 30 días en la huelga que mantenía desde hace tres semanas con la advertencia de que si en ese plazo no se alcanza un acuerdo con el Gobierno sobre las retenciones a la exportación “los cortes serán permanentes”. En la misma reunión, celebrada en el bloqueo de Gualeguaychú, al norte de Buenos Aires, los productores han leido una declaración en la que exigen a la presidenta argentina que permita legislar en material fiscal al Congreso y se ciña a la Constitución. Una respuesta directa a las acusaciones de golpismo lanzadas contra los huelguistas ayer por Cristina Fernández ante decenas de miles de personas en la Plaza de Mayo.

Con esta decisión y la del levantamiento del bloqueo principal, los camiones con mercancias han comenzado a llegar a su destino. La situación de desabastecimiento en grandes ciudades como Buenos Aires tardará entre 48 horas y siete días en normalizarse dependiendo de los productos.

En cuanto al conflicto provocado tras el anuncio del Gobierno de elevar las retenciones a la exportación de grano del 35% al 44% las espadas están en lo alto. El campo exige la creación de una mesa de negociación y rechaza las medidas anunciadas el lunes por el Gobierno de crear un sistema de compensaciones y subsidios para que, en la práctica, dicha retención quede reducida a los pequeños productores. Ayer los productores exigieron apartar de la negociación a aquellos “que saben de economía pero no saben nada de campo” en clara alusión al ministro de Economía, Martín Lousteau.

En la concentración agraria se han escuchado durísimas acusaciones contra los grupos piqueteros oficialistas comandados por Hugo Moyano, líder del principal sindicato peronista y Luís D´Elía, un teórico ex funcionario con acceso directo al palco de autoridades.

Fuente: El País de España