El 24 de abril  pasado habló por la FM  99.9 la señora Mariela Gómez, representante estudiantil por Franja Morada, sobre la situación de violencia que se vive en la Facultad de Humanidades de la UNMdP. Al respecto, cabe la reflexión de que ella habló de la violencia proveniente de los alumnos en este momento de elecciones de autoridades, pero no hizo referencia a la violencia institucional permanente, que afecta a alumnos, docentes y no docentes.

No habló de la indiferencia institucional ante los reclamos estudiantiles tramitados mediante expedientes hace años y aún sin contestar. No habló sobre una denuncia por abuso de poder contra las profesoras Rosenthal y otra, hecha mediante expediente Nº 7-3881/05 por parte de una profesora y pendiente de resolución, ni sobre el maltrato que sufren los alumnos cuando les ocurre alguna situación de abuso de poder o violencia psicológica y no saben a quién recurrir porque todos se tiran la pelota unos a otros y se lavan las manos.

No habló del caso judicial Souza Dos Santos c/Universidad Nacional de Mar del Plata por no permitírsele el ingreso a una alumna por ser extranjera, caso perdido por la UNMdP (expte. Justicia Federal Nº 10186/07), por haber hecho caso omiso a la Constitución Nacional (arts. 14 y 28).

No habló del nombramiento de docentes a dedo, que es una forma de violencia hacia otros docentes.

No habló del maltrato institucional que han sufrido docentes, que tuvieron que demandar a la Universidad por no darle un nombramiento que les correspondía.

No habló del conculcado derecho a la información, al que esta Unversidad, escudándose en la autonomía, no da cumplimiento (art. 75 inc. 22 de la Constitución Nacional – Derecho a la Información), por lo cual genera un conflicto permanente de derechos.

En síntesis, la violencia no justifica la violencia, pero hay una ley de la física que dice que toda acción genera una reacción de igual intensidad y en sentido contrario. Por lo tanto, es muy pobre el análisis hecho por la señora Mariela Gómez.

Hace falta un profundo cambio institucional en la manera de hacer las cosas: transparencia en el manejo de fondos públicos y nombramiento de docentes, trato respetuoso, prestar atención a las necesidades del colectivo institucional y abrirse a la participación de la sociedad en el control de gestión haciendo que la Universidad interactúe con la sociedad, que es la que la sostiene con los impuestos.

Fernando J. Martínez Degregori
DNI 23.706.128

(La opinión de los columnistas no siempre coincide con el pensamiento de la Dirección General).