Al respecto, la edil manifestó: “En un primer análisis, con una inflación anual real que ronda el 20 ó 25%, parece difícil pensar en bajar costos sin disminuir el servicio en un contrato como el que el Municipio tiene en ejecución con la empresa 9 de Julio, en una de cuyas cláusulas particulares (2.1.4.) obra la facultad  de pedido de recomposición del precio del contrato en función de los mayores costos”.

“En tanto la empresa pueda demostrarlos, el Departamento Ejecutivo deberá evaluar en un marco que comprenda la situación particular y el contexto global del presupuesto, el nivel de cobrabilidad de la Tasa de Servicios Urbanos, etc, si propone alguna modificación y, en ese caso enviará el proyecto de ordenanza al Concejo Deliberante”, agregó más adelante. 

“Por supuesto, el Departamento Ejecutivo reserva para sí el derecho de disminuir hasta un veinte por ciento (20 %) cada uno de los servicios contratados ya sea variando las áreas servidas o reduciendo las frecuencias con la consiguiente disminución en el precio mensual, pero creo que los vecinos de Mar del Plata y de Batán merecen una solución más ingeniosa que, simplemente, contar con menos servicios que los que tienen en la actualidad”, puntualizó luego.

Cristina Coria sostuvo:“Creo acertado que el Secretario se comprometa a  analizar el requerimiento poniendo especial atención a dos cuestiones elementales:
*  las prestaciones  que contractual y efectivamente realiza la empresa, que entiendo incluyen nivel de  cumplimiento de las tareas contratadas, a saber recolección  de residuos, barrido manual, barrido mecánico,  servicio de almejeros, cortes de césped, atención de costa y accesos a la ciudad y limpieza de playas, etc. ; y
*   la capacidad financiera del Municipio, actual y proyectada para el resto del año”.

Por último dijo: “que desde ya, los contribuyentes no pueden soportar un incremento más”.