Dirigentes de los partidos políticos afectados consultados criticaron con dureza la medida y la calificaron como “restrictiva” de la actividad partidaria.

Entre las fuerzas políticas comprendidas en la resolución de ese organismo figuran la Unión del Centro Democrático (UCeDe), el Partido de los Comunistas de la Provincia de Buenos Aires, el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST), el Partido de la Unidad (UNO), el Movimiento al Socialismo (MAS), el Partido Unión Popular, el Partido Socialista Auténtico (PSA), el Partido Obrero (PO) y el Partido Proyecto Popular.

La decisión fue publicada en el Boletín Oficial en el que se explica que la medida se adoptará porque estas agrupaciones no obtuvieron en esos dos últimos comicios el 2 por ciento del padrón electoral, que es el mínimo requerido.

Una vez decretada la caducidad, tras los cinco días para descargo que les otorga la Junta Electoral, los apoderados de esos partidos deberán esperar una elección -en este caso la legislativa de 2009- para poder reinscribirlos.

El organismo electoral bonaerense señala en su resolución que esos partidos “en los comicios correspondientes a 2005 y 2007 no alcanzaron los votos equivalentes al dos por ciento del padrón electoral”.

Esa es una exigencia que establece el inciso C del artículo 46 (Caducidad y Extinción) de la Carta Orgánica de los Partidos Políticos y de Agrupaciones Municipales (Ley bonaerense 9.889/82). La Junta Electoral intimó “a las autoridades de estos partidos para que en el término de cinco días hábiles efectúen el correspondiente descargo”.

El PO postuló como candidato a gobernador y vice en los comicios de 2007 a Daniel Rapanelli y Nora Biaggio; el Partido Socialista Auténtico a Luís Pedro Brunati y Juan Ricci; la UCeDe a Alieto Guadagni y María Teresa González Fernández y el MST a Carlos Tinnirello y Gustavo Giménez.

En el caso de Brunati, formaba parte de la lista que postuló a la presidencia a Fernando “Pino” Solanas, mientra que Guadagni estaba alineado con el Frejuli de Alberto Rodríguez Saá.

Jorge Selser, secretario general del PSA, criticó la resolución de la Junta por entender que “es una medida retrógrada y anticonstitucional, que no respeta el derecho a manifestarse políticamente y pone restricciones”.

Biaggio del PO, por su parte, aseguró que “eso aparecía como una perspectiva, pero aún no nos notificaron nada y es preocupante”.

Para Teresa González, que estaba alineada con Rodríguez Saá, “es muy malo esto de andar anulando partidos políticos, cuando en realidad se debería fomentar la participación” y destacó que “detrás de esa medida debe haber una mano negra, como siempre”. “Estoy muy preocupada e indignada con esto y no lo puedo creer”, afirmó González, ex candidata a vicegobernadora.

Fuente: DyN