Por Humberto Tumini Movimiento Libres del Sur
La Presidenta de la Nación ha informado que se le pagarán con reservas de libre disponibilidad la deuda por 6.700 millones de dólares al Club de París.
De la misma manera que nuestro Movimiento se manifestó en su momento en favor de cancelar la deuda con el FMI, hoy debe decir que no está de acuerdo en hacer lo mismo con el Club de París. El pago al Fondo significaba sacarse de encima una tutoría nefasta por la que altísimo costo tuvo el país; y se llevó adelante en un momento donde el contexto económico externo e interno indicaban que dichas reservas serían recuperadas con rapidez, como efectivamente sucedió. La realidad ahora no es la misma: por un lado no hay obligación ni necesidad de pagar esa deuda en su totalidad debilitando la posición de las reservas, se puede ir haciéndolo paulatinamente en un período mas largo. Mientras que por otra parte el contexto económico mundial es claramente negativo, y en lo interno afrontamos problemas que requieren tener las espaldas bien cubiertas en lo macroeconómico, y recursos para cubrir necesidades que van desde inversión productiva, a salud, educación, etc.
No compartimos el criterio expresado por empresarios como Pescarmona, Ratazzi o Lascurain de que así Argentina “avanzará en el sistema internacional financiero, que es el que nos puede hacer vivir con nuevas inversiones a tasas razonables” o lo que manifestó De Narvaez respecto de que “pagar las deudas es el primer paso para que nuestro país vuelva a ser confiable, previsible y respetado. Esta decisión permite volver al mercado de capitales del mundo”.
Nada más irreal e interesado que eso. Nuestra nación será respetada y tendrá crédito con condiciones aceptables para seguir creciendo, en tanto y en cuanto tenga por si misma una economía fuerte y soberana. Basta experiencia acumulamos al respecto.
ACLARACIÓN: La opinión vertida en esta columna no siempre coincide con el pensamiento de la Dirección General.