“Es común ver como se reclama el cumplimiento del artículo 14 de nuestra Constitución.

Un periodista del noticiero se acerca a un automovilista detenido en un piquete y éste, ofuscado, reclama la aplicación de su derecho constitucional de transitar por el territorio argentino; sin embargo, no usa el mismo énfasis para que se cumpla con otro derecho constitucional, como es el de trabajar en condiciones dignas y con retribución justa, tal como reclama el que le impide el paso.

La semana pasada, en nuestra ciudad, distintos vecinalistas se reunieron con la cúpula policial para coordinar acciones que impidan la usurpación de terrenos en sus barrios. No son justamente los propietarios de esas tierras los que reclaman, sino vecinos que acusan a los ocupantes de ”afear el barrio“, palabras textuales del funcionario a cargo del Banco de Tierras de Mar del Plata, que además vinculan a esas personas con hechos delictuales que jamás denuncian porque en la mayoría de los casos no pueden demostrarlo. Simplemente generalizan...

No está en discusión que el apropiarse de una propiedad privada es ilegal, pero no se visualiza, o no se quiere visualizar, que la cuestión de fondo que lleva a muchas de esas personas a tomar esa actitud es la falta de políticas sociales, en especial para dar una solución efectiva al grave problema habitacional que sufre Mar del Plata.

Los que se quejan de los usurpadores reclaman el derecho constitucional sobre la propiedad privada, aunque esa propiedad no les pertenezca y en muchos casos ni siquiera conozcan a su verdadero dueño. Pero en estos casos tampoco defienden con el mismo ímpetu otro derecho constitucional que es el acceso a una vivienda digna, o simplemente a una vivienda. Ha quedado demostrado muchas veces que en los insuficientes planes de viviendas que se llevan a cabo la calidad no cuenta, ”total, van a hacer asado con el parquet“.

Es común que se confunda la justicia social con la beneficencia. Se cree que simplemente con llevar dos paquetes de fideos al comedor más cercano o esa ropa que nunca más se pondrían ya está.

A nivel político la confusión es más profunda, aún cuando mezclan la justicia social con clientelismo político: colaboran con los más necesitados siempre y cuando estén al mando de algún puntero político.

Mar del Plata, segunda en el índice de desocupación y albergue diario de personas de otras provincias o países vecinos que la vieron como una solución a su ingrata vida, pareciera no saber cómo aplicar políticas de fondo para solucionar los problemas sociales existentes y, al mismo tiempo, descubrir que la alfombra ya queda chica para seguir escondiéndolos.

Está bien, o mejor dicho está mal, que ocupen un terreno que no les pertenece. Sáquenlos. ¿Y eso es todo? ¿Ahí terminan las acciones? Suena en muchos casos a ”que se jodan, para qué son pobres“.

Ni siquiera la comuna maneja estadísticas de cuál es la necesidad real de viviendas sociales en Mar del Plata. Hace poco se decidió hacer un relevamiento al respecto y la forma de llevarlo a cabo consistió en convocar a que se inscriban en la municipalidad a quienes estén necesitados.

Evidentemente no fueron claros en el mensaje, porque en una de las noches más frías de Mar del Plata gran cantidad de vecinos hacían cola en la calle de la Municipalidad esperando ser atendidos. No creo que esa gente se haya movilizado hasta allí, con lo que les cuesta en muchos casos, simplemente para un censo. Está claro que estaban allí porque la convocatoria les despertó expectativas y confían en una solución, que en el hipotético caso de llegarles, nunca será en el tiempo en que lo necesitan.

¿Sabrá el Plan Estratégico cuál es el déficit habitacional de la ciudad? Lo dudo. Pero con lo que se ha invertido desde su creación se hubieran podido proveer unos cuantos módulos de esos que se destinan a viviendas, aunque más no sea para que la gente que lo precisa y no tiene otras posibilidades pueda acceder a una ”vivienda casi digna“.

Los funcionarios y vecinalistas seguirán en la lucha para que sus barrios ”no se afeen“ y se defienda el derecho constitucional de la propiedad privada, propia o ajena.

Sin por el contrario, destinaran un tiempo de su militancia a debatir cuestiones sociales de fondo y se involucraran primero en reconocer que esa realidad existe y después en saber qué puede aportar cada uno para cambiarla, quizás ahí sí la solución sea de fondo.

Hoy sólo pelearán para sacar de su barrio a la familia usurpadora. Y ésta deberá intentar instalarse en otro sitio, porque en algún lugar tiene que vivir. ¿O será que la intención de muchos es eliminar a estas familias del mapa de Mar del Plata? Sinceramente, a esta altura, ya no me asombraría...

Mucha defensa del artículo 14 de la Constitución Argentina pero poca lucha por el cumplimiento del artículo 14 bis.

Y, aunque no soy peronista, me remito en esta oportunidad a lo dicho Perón en 1944:

Uno de los postulados sobresale por su importancia de todos los demás: la Justicia Social. Consideramos que los mandatarios que en esta hora no realizaran tina acción de justicia social y se dedicaran a la simple obra administrativa de gobierno, pasarán a la historia como algo intrascendente e indigno de ser recordado.

Las revoluciones deben ser profundamente innovadoras en sus finalidades; y en el caso nuestro, la innovación fundamental radica en llevar a las masas trabajadoras a un bienestar superior al que actualmente gozan; y en unir, por ese medio, a todos los argentinos, en forma de plasmar la nacionalidad, de modo que no pueda romperse ante ningún embate”.

ACLARACIÓN: La opinión vertida en este espacio no siempre coincide con el Pensamiento de la Dirección General.