La crisis económica que se abate sobre España –y el mundo en general- está golpeando fuerte a los inmigrantes que abandonaron sus países para buscar un futuro mejor en tierras ibéricas.
De acuerdo a los últimos datos, 5.088 ciudadanos extranjeros que residen allí pidieron regresar a sus tierras con la ayuda del plan de retorno voluntario puesto en marcha en 2008.
Según informó el Ministerio de Trabajo e Inmigración español, ya se tramitaron 4.753 peticiones y fueron aprobadas 3.977. Los ciudadanos de países latinoamericanos son “los principales solicitantes” y concentran el 91% de los pedidos.
Los argentinos que quieren regresar suman en este momento 364. Hasta diciembre del año pasado eran 313. Es el tercer grupo en cantidad. En primer lugar se ubican, abrumadoramente, los ecuatorianos: 1.749. Luego le siguen los colombianos con 771.
El Plan de retorno voluntario para trabajadores extranjeros desempleados se puso en marcha en noviembre de 2008 y beneficia entre otros a ciudadanos de 10 países iberoamericanos: Argentina, Chile, Colombia, Ecuador, México, Paraguay, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.
Los solicitantes deben estar inscriptos como demandantes de empleo y el plan consiste en que reciben por adelantado, en dos veces, el subsidio de desempleo mensual: el 40% en España y el resto, al regresar al país de origen.
Quienes se acogieron al plan recibido una media de 9.000 euros, según el ministerio.
El gobierno socialista español anunció este plan en abril de 2008, al comienzo de la crisis económica que desde entonces se ha agravado y sumido a España en la recesión.
El desempleo se ha más que duplicado desde el inicio de la crisis y en el primer trimestre superó los 4 millones de personas (más del 17% de la población activa y más del 27% entre los inmigrantes). El 12% de la población española (46,6 millones de personas) es inmigrante.
Fuente: EFE