Tras el derrumbe electoral, presentó su renuncia indeclinable el secretario de Transporte. También circulan versiones sobre el alejamiento de Moreno, responsable de los números del INDEC, y del ministro de Economía, Carlos Fernández.
Las consecuencias de violento cachetazo que recibió el gobierno en las elecciones del domingo no se hacen esperar. Este miércoles por la tarde, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner aceptó la renuncia de Ricardo Jaime, el cuestionado secretario de Transporte y uno de los hombres fuertes del kirchnerismo.
Además de la salida de Jaime, distintas versiones indican que también habría presentado su renuncia otro de los miembros más polémicos del Gabinete: el secretario de Comercio Interior y responsable de los números del INDEC Guillermo Moreno. Y otro de los que podrían alejarse es el ministro de Economía, Carlos Fernández; hasta las 17:30, el ministro estaba confirmado en la comitiva que viajará mañana a la reunión del BID en Chile, pero hace minutos, su nombre habría desaparecido de la lista. Desde el Palacio de Hacienda aseguraron, sin embargo, que “el ministro no presentó ninguna renuncia”.
La renuncia de Jaime se conoció menos de 72 horas después del duro golpe que recibió el kirchnerismo con la derrota electoral que sufrió en Buenos Aires el propio ex presidente Néstor Kirchner.
Desde la oposición, el peronismo no kirchnerista e incluso algunos grupos que hasta no hace mucho eran aliados del Gobierno habían reclamado que el Ejecutivo leyera correctamente el mensaje de las urnas y encarara un amplio recambio en el Gabinete. Hasta ahora, la única modificación había sido la salida de Graciela Ocaña y la llegada de Juan Carlos Manzur al Ministerio de Salud, un cambio que no estaba en el listado de reclamos.
Los nombres de Jaime y Moreno, en cambio, están desde hace tiempo entre los más cuestionados, junto con el del ministro de Planificación, Julio De Vido. Ayer De Vido había puesto su renuncia a disposición de Cristina, pero la Presidenta le pidió que se quedara en el Gobierno.
El renunciado secretario de Transporte Jaime tuvo una participación central en la reestatización de Aerolíneas, el manejo de los ferrocarriles que volvieron al Estado y en la relación con las fuertemente subsidiadas empresas de transporte de pasajeros. Respondía al ministro De Vido.
Desde su cargo de secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno lideró la intervención al INDEC y a él se le atribuyen las supuestas manipulaciones que desde hace tiempo tienen bajo permanente sospecha a los índices oficiales. También fue el encargado de duras negociaciones para controlar los precios de bienes y servicios.