El concejal Maximiliano Abad fue quien propició la iniciativa la que estuvo acompañada por todo el Cuerpo Deliberativo.

Abad leyó un documento expresando que “Los aviadores que la conocen y tienen el orgullo de disfrutar de su amistad dicen que, Charito Germanó es un ángel, que envuelto en la bandera de Francia, Dios le regaló a la Aeronáutica Argentina.

Su padre fue un guerrero de la libertad de Francia, enamorado del cielo, defendiéndolo, sucumbió ante la arrolladora máquina de guerra Nazi que invadía su tierra natal.

Dejó sembradas dos semillas, la del amor a la libertad y la de la pasión por el vuelo, para que germinaran en el suelo más propicio y en el seno de un pueblo noble.

Fueron las propias monjitas francesas las encargadas de llevar ese frágil retoño y fueron ellas quienes eligieron a nuestro país como destino. Tierra de libertad habitada por gente noble.

El primer fruto de ese pequeño retoño que se alimentaba en las aulas del saber de ese claustro francés, fue un poema. Un poema que expresaba sin lugar a dudas que, Marie Rosoi Janfreu, tal su nombre, había nacido con alas. María del Rosario, de allí “Charito” sabía que su camino se encontraba en el cielo, ya nada podía detenerla.

El destino quiso que su mentor y maestro se convirtiera en su esposo, Santiago Germanó, una gloria de la acrobacia y de la aviación argentina, juntos asombraron primero al país y luego al mundo entero.

Charito ostenta hoy, un récord vigente que ningún aviador ha superado hasta nuestros días, es la dueña de 963 lúpins consecutivos y fue la primera mujer aviadora en el mundo, en obtener el Campeonato Mundial de Acrobacia Aérea. Hecho acaecido en la ciudad de Coventry, en el Reino Unido de la Gran Bretaña, en el año de 1954.

Su fama se disparó, fue recibida por Reyes, Presidentes, Embajadores y dignatarios alrededor de todo el mundo. Una famosa marca de cosméticos etiquetó un perfume con el nombre de “Charito”.

Conquistó su título mundial con un avión fabricado íntegramente en nuestro país. El gobierno de su Francia natal, le hizo una importante oferta económica para que siguiera su carrera profesional con aquella bandera. Charito declinó aquella oferta, su corazón pertenecía ya a este suelo que la había recibido y en el que había aprendido a volar.

Lamentablemente, después de los hechos de 1955, esta brillante historia y su protagonista, se fueron perdiendo en el tiempo, pero igual Charito siguió volando, acumulando títulos,  récords y prestigio. Es por ello, que hoy, como joven político Radical, quiero que rindamos también un tributo de gratitud al general Juan Domingo Perón por el impulso que dio durante sus dos primeros períodos de gobierno democrático, al deporte nacional, impulsándolo en todas sus disciplinas, para que sea reconocido en el mundo todo.

Hemos elegido el día de hoy, martes 11 de Agosto, para que este reconocimiento se sume a los actos conmemorativos de la creación de nuestra Fuerza Aérea Argentina, hecho ocurrido precisamente, un 10 de Agosto de 1912.

Esa iniciativa, impulsada por igual, por civiles y militares, es la que en sus 97 años de trayectoria, concretó toda esta historia grande para nuestro querido país.

La aeronáutica argentina, representada hoy por esta noble dama del aire, Charito Germanó, es la misma que asombró al mundo en nuestra historia más reciente. Los pilotos de la Fuerza Aérea, de la Aviación Naval, del Ejército, de la Prefectura y los Aviadores Civiles, fueron los cinco dedos de una mano que juntos y firmemente apretados, se convirtieron en el puño que la Nación Argentina blandió en el aire, para reivindicar nuestro derecho soberano en las Islas Malvinas. A todos ellos, también nuestro homenaje.

Luego de esta lectura se procedió a la entrega de dicho reconocimiento a la señora Germanó quien muy emocionada agradeció a las autoridades la distinción y a los presentes el haber acompañado en tan importante momento para ella.