La presentación de la velada estuvo a cargo de Analía Wetzel, directora, y Valeria Rodríguez, de la editorial Cultura Fusión.

A su vez, el Dr. Rafael F. Oteriño, también poeta y quien prologó esta obra, explicó el significado del Haiku, sus orígenes en el siglo XVI y su modo dual de operar, que por un lado se muestra dotado de una aparente objetividad (alusión a pájaros, aguas, movimiento de las hojas) y en un segundo momento -de manera impensada y en un vuelco que concita todo un desplazamiento semántico- confronta esos datos con otros no menos conocidos, pero de distinta fuente (voces, llanto, estaciones), imponiendo al lector un escenario distinto.

El autor adelantó: “estos llanos poemitas, vestidos de haiku para la ocasión, son un ejercicio de humildad poética que he practicado con entusiasmo no necesariamente proporcional a la calidad del resultado. Creo que, como todas las cosas importantes de la vida, la austeridad es un don que glorifica...”

Y agregó: “los Haiku de Elio Aprile están comprometidos con esta tradición. Se observa en ellos la economía verbal que le es propia, el lenguaje frontal puesto a abordar acotadas parcelas de la existencia y el trazo fuerte de la imágenes como expresión de una pieza que debe hablar sin intermediarios“.

Precisamente este nuevo libro presenta a las poesías con excelentes imágenes de reconocidos artistas plásticos de la ciudad y del país, como Agola, Balester, Fernández Barragán, Gemín, Larrea, Magnani, Mammana, Menna, Muñoz Abril, Perutic Burcio, Ojea Morgan, Roura y Wetzel que realzan su jerarquía.