García explicó que la banda, en una primera parte, fue “desmembrada” a mediados de diciembre en Cariló, y “culminó con su raíz medular a fines de diciembre en la zona de San Bernardo”.

Destacó que resultó de mucha importancia el “aporte municipal en lo que respecta a los recursos humanos y logísticos y la apoyatura necesaria para lograr este esclarecimiento”.

Además, hizo principal hincapié en lo relevante que fue la participación comunitaria, que “permitió cerrar esta situación porque los indicios eran importantes paro no ameritaban como para un allanamiento”, testimonios que “aportaron datos determinantes para que el fiscal nos otorgara” el mismo.

El modus operandi era “irrumpir en domicilios de la región y de turistas privándolos de la libertad en la vivienda” y en la mayor parte de los casos con sustracción de vehículos que, luego “utilizar como elemento de fuga”, agregó.

García también detalló que fueron secuestradas “ocho armas de grueso calibre secuestradas (escopetas, carabinas, escopetas recortadas, y pistolas calibre 45, 38 y 32)”, y dijo que, de acuerdo a las investigaciones, los malvivientes “operaron durante el transcurso de 2009, con más profundidad a partir de junio”.

A los delincuentes detenidos, hasta el momento 4, se les imputan “aproximadamente 12” hechos, añadió el funcionario policial.