En una entrevista concedida a Rubén Ferrari, el legislador expresó: “esta situación no hace otra cosa que corroborar lo que vengo denunciando hace tiempo, es decir, que Mar del Plata no tiene una plantilla productiva, que no prioriza los temas de su agenda y que no sabe aún dónde están las cuestiones importantes que hacen al crecimiento y el mantenimiento económico de la ciudad”.

Asimismo, subrayó: “en estos momentos, cuando Mar del Plata es noticia por su alto nivel de desocupación y mientras tendríamos que estar recuperando mano de obra por las características de lo que se viene en el plano internacional, ocurren estas cosas, lo que marca que vamos por mal camino”.

Y continuó: “no es concebible que el Gobierno bonaerense invierta mucho dinero en festivales y obras de teatro, compitiendo incluso deslealmente con la actividad privada, cuando no pone el mismo empeño en los temas de verdadero interés”.

A colación, Serebrinsky puso el acento en que “el Estado nacional promete cosas que nunca cumple y debe la mayoría de las obras públicas que ha licitado”. “Además – remarcó - tiene un problema de caja, por el cual quiso manotear los fondos del Bicentenario”.

“Lo concreto es que en el presupuesto le dimos como instrumento 25 mil millones de pesos para pago de deuda externa y que su verdadero problema es, en realidad, la deuda pública interna que existe a nivel municipal, provincial y nacional”, completó.

Luego, retomando el tema anterior, Tato analizó: “no tener al Puerto como política de Estado prioritaria para Mar del Plata implica estar corriendo siempre detrás de los acontecimientos, una práctica que debemos desterrar”.

Por último, consultado por el traslado de las cargas, del mar a las vías terrestres, respondió: “las rutas están colapsadas lo que me hace suponer que quizás se quiso favorecer a algún sector en particular, como la industria camionera o el Sindicato de Camioneros”.