A menos que el Gobierno logre controlar la inflación, los salarios perderán entre un 3% y 6% de su capacidad de compra real durante este año. Esa advertencia figura en el último informe de la consultora Economía y Regiones, cuyo director es Rogelio Frigerio. “Aún con un aumento de salarios cercano al 16%, durante el 2010 esperamos una merma del salario real en torno al 3%”, detalla un trabajo de este grupo de economistas, que estima la inflación en 23%-24% y un dólar a $ 4,20 como promedio.

Ese 3% de caída es para los promedios anuales. Si la comparación del poder adquisitivo se realiza entre diciembre de 2009 y diciembre de 2010, el retroceso de los salarios sería aún mayor: 6,1%. En el salario “real” se evalúan los sueldos en relación a la inflación y al tipo de cambio (no sólo el dólar, sino también las otras monedas con las que el país tiene comercio). “La inflación perjudica la perfomance de la demanda al desgastar el poder de compra de los salarios”, señalan.

“Una inflación acelerándose sucesivamente y alcanzando niveles de 23%-24% impone una fuerte restricción a la recuperación del nivel de actividad”, puntualiza Economía y Regiones. “La inflación erosiona la competitividad-precio que otorga el tipo de cambio depreciado”, agregan. Si el tipo de cambio real tiende a apreciarse (eso significa un peso más fuerte), los productos nacionales se vuelven más caros que los importados. Esto provocaría que los sectores productivos congelen su demanda de empleo, insumos y servicios vinculados. En el otro extremo, si hay una marcada devaluación (el peso vale menos contra el dólar), esto se trasladaría a precios y la inflación, que ya viene alta, podría dispararse aún más.

“El tipo de cambio real se apreció hasta septiembre de 2008. Allí, la tendencia se revierte y el peso se deprecia nuevamente contra el dólar producto del encarecimiento del billete estadounidense respecto de todas las monedas del mundo (por la crisis internacional). A partir de marzo de 2009, el tipo de cambio real argentino vuelve a apreciarse a lo largo del año hasta ubicarse un 4,9% más caro en diciembre de 2009 respecto al mismo mes de 2008”, entiende el análisis. “Profundizando esta última tendencia, esperamos una depreciación nominal del tipo de cambio en torno al 10,3% ($ 4,20 por dólar), pero que con un incremento de precios del 23,5%, representaría una apreciación promedio del 11,3% en 2010 respecto a 2009”.

“Como ocurrió muchas veces en la historia argentina, la aceleración de la inflación podría terminar frenando la recuperación. Tanto la apreciación del tipo de cambio real como la caída del poder adquisitivo del salario perjudicarán la oferta y la demanda (respectivamente), arremetiendo contra el crecimiento económico”, marcan.
Fuente: ECO