Atrás quedaron los días de promesas de calidad institucional e imagen de gestión transparente que intentó mostrar el gobierno de Pulti en sus inicios.

Es que una a una van cayendo las máscaras de un entramado de dudosas relaciones que atraviesan la primera línea de la gestión del oficialismo local.

Un nuevo sector se hizo propio el gobierno municipal desplazando el aparato político enquistado durante 30 años de gobiernos radicales. Se trata de una “raza” de nuevos funcionarios que abrazando la política como herramienta de poder, logran fomentar sus intereses aprovechando sus privilegiados lugares en la función pública: los “EMPRESARIOS – FUNCIONARIOS”.

Uno de los primeros hechos se registró en mayo de 2009, cuando el prominente empresario inmobiliario Xavier Marcone, por entonces delegado del Puerto, fue denunciado por haber autorizado la habilitación para construir locales comerciales sobre un terreno conocido como la “Plaza del Hincha” (por el Club Aldosivi) que estaba en situación de juicio por usucapión. Los terrenos estaban en manos de la sociedad de fomento del Puerto, cuyo apoderado era Marcone y que autorizó la construcción de los locales comerciales. La novedad de este caso se da al advertir que la inmobiliaria (Marcone Bienes Raíces) del entonces delegado elegido por Pulti para gestionar la zona del puerto, se encontraba a la vuelta de los locales en construcción. Ante la presión vecinal y de los hinchas de Aldosivi, que representan a la mayoría de los vecinos del puerto, Marcone no tuvo más que renunciar.

Acto seguido arribó a la delegación el empresario de la pesca Mariano Retrivi (B P SAN JORGE S.A.). No pasaron dos meses que la embarcación de su propiedad “San Jorge I” fue encontrada pescando de manera ilegal en las costas uruguayas y fue secuestrada por la Prefectura oriental. Durante esos días el flamante delegado del Puerto desapareció de la ciudad y la prensa no logró contactarlo. Sólo giró un comunicado de prensa donde trataba de desligarse de la maniobra que casi genera un conflicto bilateral entre Uruguay y Argentina. Nunca más se dio explicaciones y Retrivi continuó con su función pública como si nada hubiera pasado.

Otro caso paradigmático es el del ex precandidato a intendente por el Frente para la Victoria, Horacio Tettamanti.

Tettamanti acompañó y financió la fórmula de “Pulti Intendente” al no compartir la estrategia de la “Concertación” con el radicalismo que encabezaban Cristina y Cobos a nivel nacional. Esto le valió la Secretaría de Producción, tras del triunfo del entonces vecinalista partido “Acción Marplatense”, devenido en la herramienta electoral del kirchnerismo marplatense en el 2009.

Dicho empresario, dueño del Astillero “SPI” y presidente de la Asociación Bonaerense de la Industria Naval (ABIN), viajó a Rusia en diciembre del 2008 con la comitiva del gobierno nacional encabezada por la propia Presidenta de la Nación. Tettamanti, en representación de su empresa, firmó acuerdos de negocios con la empresa rusa “Monolit” para crear una empresa mixta y así ampliar sus negocios en Europa y América Latina.

No obstante aprovechar su privilegiado doble rol de empresario y funcionario público para incrementar sus fuentes de negocios, en mayo de este año su empresa anunció que se unificaría con el “Astillero Río Santiago”, perteneciente al gobierno de la provincia de Buenos Aires para construir barcazas y remolcadores. Además hace pocos días atrás, usando el traje de funcionario público, y como presidente de ABIN, pidió al Ejecutivo municipal la utilización de las inmediaciones del Hotel Provincial. El intendente accedió con celeridad al pedido y le agregó el no cobro de las tasas correspondientes a su uso.

Hasta ahora quienes ejercen su doble rol de empresarios funcionarios sólo han recurrido a usar su privilegiado lugar en la función pública para poder hacer negocios, en muchas ocasiones, en nombre del Estado.

Pero el colmo de los botones de muestra, llegará mañana jueves al Concejo Deliberante cuando, promovido por las cámaras de empresarios portuarios, un proyecto de ordenanza autorizará al Ejecutivo a condonar una deuda de $38.000.000 de pesos vinculada a la tasa de Inspección Veterinaria. A cambio, las cámaras se comprometerían a invertir más de $8.000.000 en el mejoramiento de las calles del puerto, las cuales son continuamente sobrecargadas por los camiones que ingresan, y sobre todo egresan, con el recurso pesquero para la exportación.

Lo que omite el Municipio en auspiciar es que el mejoramiento de las calles y la infraestructura portuaria al que irían destinados los $8.000.000 a cambio de la condonación de $38.000.000 forma parte de las condiciones que impone la Comunidad Económica Europea para que los empresarios nativos puedan seguir exportando el recurso natural que explotan en mar argentino.

Otro dato que omite el Municipio y que no ha salido a la luz es el listado de las empresas que adeudan millones a las cuentas de la Comuna. Y ahí aparece la figura de Mariano Retrivi (Delegado del Puerto), quien como titular (gerente y apoderado) de la Asociación de Embarcaciones de Pesca Costera, viene pidiendo enérgicamente, ya desde antes de ser funcionario, junto al resto de las cámaras, la condonación de la deuda, lo que les daría una quita de casi $30.000.000. No es casual el pedido de Retrivi: su empresa se vería beneficiada con la condonación de una deuda que asciende a los $98.000.

En este marco, Retrivi y el resto de las cámaras empresariales pesqueras tendrían asegurado el voto a favor de los concejales oficialistas.

Una mano lava a la otra, y ser funcionario de Pulti tiene sus ventaja, sobre todo si sos empresario.
La opinión vertida en este espacio no siempre coincide con el pensamiento de la Dirección General.