“Hola, amigos y amigas de Mar del Plata. El “Flaco” Ferrari me invitó a escribir algo y aquí estoy, como en su momento, cuando acepté con gusto las invitaciones de Julio Lagos, Florencia Cordero, Eduardo Zanoli y el Cholo Ciano para “salir al aire” en la radio.

Es muy grato para mí poder contactarme con los oyentes o lectores, como también lo he hecho a través de “El Retrato de Hoy” de Miguel Avellaneda o por medio de La Capital, gracias a que Marcelo Pasetti publicó la crónica de la visita de León Greco.

Llevo poco más de 7 años en Málaga y me gustaría poder generar una vía más fluida de comunicación con los marplatenses; y también, buscar proyectos en común.

Es cierto que lo intenté en varias ocasiones con distintas autoridades, pero imagino que no ha sido muy atractiva mi oferta.

Estoy informado de la actualidad de la ciudad (Internet, amigos, colegas, facebook..) y en 2009 hice una visita que duró sólo tres días pero que me permitió tomar contacto directo con esas calles tan conocidas y su gente.

Los contrastes de encontrar el bache de la rotonda de Santa Clara del Mar, como en 1985, y el nuevo paseo de la zona de Punta Iglesia; los colectivos con los problemas de monedas, asaltos y horarios, y la excelente oferta gastronómica en la zona de Guemes y la vieja Terminal; los vendedores ambulantes de la Av. Luro, como en cualquier verano de 20 años atrás, y nuevos locales, tiendas y bares en el centro.

Mar del Plata es única. Con sus contrastes, bellezas, eventos internacionales y problemas domésticos.

Como les decía, acepté esta invitación de Rubén para escribir algunas pocas líneas y transmitir mi agradecimiento para ustedes, que me permitieron vivir casi 20 años inolvidables en la Ciudad Feliz.

¿Por qué estoy aquí, entonces? Situaciones personales y de trabajo me llevaron a tomar decisiones inimaginables pero necesarias para seguir adelante.

Por ello, cuando leo o escucho a quienes dicen que “dejas de ser argentino si te vas del país” o “que los que realmente son argentinos son los que se quedan a luchar”, sólo me permito decirles - con el máximo respeto - que cada persona tiene una razón, una historia o una situación que merece ser escuchada.

Quizás así pueda uno comprender y darle sentido al dejar los afectos, familia, amigos y las raíces para buscar una nueva ilusión en otro sitio… Un sitio que seguramente no será el tuyo, nunca.

Puedo asegurarles, que ser argentino fuera de Argentina, es una enorme responsabilidad. Cada día por el resto de los días que vivas fuera, tienes que trabajar como el que más, no fallar e intentar cada día ser mejor.

Muchos que han pasado antes por aquí han dejado huella, pero no precisamente de la mejor manera.

Estoy orgulloso de poder contribuir – humildemente- a llevar mis costumbres, orígenes, conocimientos y sacrificio para buscar un futuro mejor para mí y mi familia.

Y lamento profundamente que no pueda ser en estos momentos en mi país. Les deseo lo mejor…

Me satisface que colegas y compañeros como Rubén, Claudio, Beto, El Gato, Miguel, Cristian, Mónica, Marta y muchos más sigan intentando cada mañana renovar el compromiso con la ciudad y su gente.

En muchas ocasiones, esa misma gente no puede imaginar lo difícil que llega a ser lograrlo.

Y aprovecho para invitarlos a visitar www.dz3.es, donde podremos compartir más cosas.

Un abrazo muy fuerte de quien los respeta, los quiere y los extraña.

Hasta pronto”.