Unos 400 trabajadores gastronómicos de Mar del Plata y la zona se manifestaron durante el mediodía, en diferentes sectores de la ciudad, en el marco de su estado de alerta y movilización por la falta de respuesta por parte de los empresarios, al reclamo salarial que desde hace más de un mes hace la Unión de Trabajadores del Turismo Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina a la Federación Empresaria Gastronómica Hotelera nacional.

Desde las 10, representantes de las seccionales de Bahía Blanca, Tandil, Chascomús, Villa Gesell, Olavarría, Tres Arroyos y Pergamino se nuclearon junto con los locales, en las puertas de UTHGRA local, en San Luis casi Alberti. También, en señal de apoyo, se hicieron presentes miembros de CGT, UTA, ALEARA, UECARA, AFIP-DGI, Sindicato de Guardavidas, Viajantes y Empleados de Comercio.

Desde el gremio, los manifestantes se dirigieron a la zona comercial Güemes (incluyendo el sector de Olavarría) donde comenzó la marcha, de manera pacífica, aunque con mucho ruido. Panfletos, pirotecnia, altavoces y una sirena acompañaron el reclamo que se hizo escuchar y llamó la atención de muchos que se encontraban en el sector. También hubo algunas pintadas y pegadas de folletos en puertas de restaurantes donde no se cumpliría con los convenios laborales adecuados.

Finalizada esta primera etapa de la movilización, los trabajadores se dirigieron al Hotel 13 de Julio, donde se está desarrollando la Semana Social, organizada por el clero católico. En el lugar, la secretaria General de UTHGRA local, Mercedes Morro, fue recibida por Monseñor Jorge Casaretto a quien le entregó una carta solicitando la mediación de la iglesia ante los empresarios, para que los miles y miles de trabajadores del sector que habitan en el territorio argentino, “puedan tener un salario adecuado a los tiempos que corren y así asegurar la educación, salud y servicios básicos a sus familias”.

En la reunión, el clérigo se mostró a favor del reclamo laboral y respondió que haría todo lo que esté a su alcance, aunque consciente de la relación Iglesia-Gobierno, tiene sus dudas de cuánto pueda llegar a ser escuchada su voz.

Luego de este encuentro, la manifestación continuó por el sector de restaurantes céntricos, principalmente por calle Belgrano, donde los escraches se multiplicaron frente a las puertas de los locales de Papá Gino, Zafarrancho, Montecattini, etc.

“Estamos de nuevo en la lucha ante la tozudez del empresariado que no quiere acceder a un aumento lógico. Queremos un acuerdo razonable para ambos” dijo Mercedes Morro durante la marcha, al tiempo que anunció que si luego de este fin de semana de movilizaciones y escraches a nivel nacional, la parte empresarial no muestra signos de llegar a un acuerdo, “comenzaremos con paros sorpresivos en distintos establecimientos”.