El Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada informaron en la página de Internet de la ONEMI “que el sismo no reúne las características para generar tsunami”.

“Según información proporcionada por el Servicio de Sismología de la Universidad de Chile, la magnitud del sismo fue de 6.5 grados en la escala de Richter y con una referencia geográfica de 149 kilómetros al oeste de Tirua”.

Previamente, el Instituto Geológico de Estados Unidos (USGS), había reportado un movimiento telúrico de 7,1 grados a 69 kilómetros al noroeste de Temuco y a 16,9 kilómetros de profundidad, según difundió la agencia de noticias italiana Ansa.

Pero en una comunicación con la Televisión Nacional de Chile, la ONEMI rectificó la intensidad del sismo, de 7,1 a 6,5, y descartó la alarma por maremoto emitida por el organismo estadounidense.

En las zonas cercanas al epicentro del movimiento hubo “cortes parciales de energía eléctrica y de líneas telefónicas”, con saturación como sucede en estos casos cuando todos quieren comunicarse con sus familias, explicaron desde la ONEMI.

Al caer la tarde no había un reporte de daños ni víctimas, en tanto fuentes de la región de Bío Bío, asolada por el terremoto del 27 de febrero pasado, dijeron a la televisión chilena que “no ha pasado nada” más que el susto tras lo vivido hace menos de un año.

A las 3 de la mañana hubo un sismo de grado 3 en la escala de Richter en Copiapó -norte-, según medios chilenos, y al mediodía otro de grado 4 en la zona central que se sintió en Viña del Mar y Valparaíso.

El terremoto de esta tarde se sintió con fuerza en la cordillera norpatagónica, especialmente en San Martín de los Andes y Bariloche.

Según el Servicio Sismológico de Estados Unidos, el sismo tuvo epicentro en Concepción, en el sur de Chile, y se sintió en esa ciudad especialmente, además de Talca, Temuco, Valdivia.

Desde la misma latitud en Argentina hasta Bariloche también fue perceptible, especialmente en los barrios del este de esta ciudad rionegrina, sin causar daños.