Debido a la tasa de desocupación más baja de su historia y los más de 20.000 puestos laborales que se prevé que se generen en los próximos meses, el gobierno de José Mujica pretende convocar mano de obra de países vecinos a cambio de seductoras condiciones
“Uruguay este año prevé un crecimiento de su PIB en el orden del 4%, esto significa una generación de unos 25.000 puestos de trabajo nuevos en el correr del año, en distintos sectores de la actividad económica”, afirmó el ministro de Trabajo, Eduardo Brenta, en conferencia de prensa.
“Uno de los elementos que nos preocupa es que Uruguay está ubicado en la tasa de desempleo más baja de su historia; el promedio del año pasado fue de 6,2% y la última tasa fue de 5,5%”, sostuvo.
“Uruguay tiene unas 95.000 personas desocupadas y esto plantea, en un escenario de crecimiento de la actividad económica, un desafío significativo, dado que la cualificación exigida para estos 25.000 puestos de trabajo no está necesariamente acorde a los recursos humanos de los trabajadores que aún hoy no han conseguido empleo”, explicó.
Ante la “insuficiencia de mano de obra cualificada en el país”, el gobierno planea así la “flexibilización de políticas vinculadas a la migración de trabajadores cualificados y también a una política proactiva de retorno de uruguayos que se encuentran en el exterior”.
Con esta meta, en marzo el Ministerio pondrá en funcionamiento una página en internet donde se podrán consultar ofertas laborales en el país tanto para “compatriotas fuera del país y eventualmente de otros ciudadanos de otros países en áreas de la actividad donde la oferta de trabajadores uruguayos sea insuficiente”, indicó el secretario de Estado.