La Corte Suprema de Justicia de la Nación confirmó ayer la pena de reclusión perpetua para tres ex suboficiales de la Policía Bonaerense condenados por el secuestro, violación y homicidio de Natalia Melmann, hecho ocurrido en febrero de 2001 en Miramar.
Gustavo Melmann, padre de la víctima, había iniciado el jueves pasado una huelga de hambre en una carpa que instaló frente al Palacio de Tribunales, sede de la Corte Suprema, hasta tanto el tribunal no resolviera la situación de los ex policías, ya que iba a comenzar a ser beneficiarios de salidas transitorias.
Los jueces Ricardo Lorenzetti, Elena Highton de Nolasco, Carlos Fayt, Enrique Petracchi y Carmen Argibaypor rechazaron por “inadmisible” un planteo de las defensas de los ex suboficiales Ricardo Suárez, Carlos Echenique y Ricardo Anselmini, informaron fuentes judiciales. Los tres habían sido condenados en 2002 por el Tribunal Oral en lo Criminal 2 de Mar del Plata a reclusión perpetua, por haber secuestrado, violado y estrangulado a Natalia.
Pero luego la Cámara de Casación le redujo la condena a prisión perpetua, por lo que pudieron comenzar a gozar de salidas transitorias, hasta que la Suprema Corte bonaerense reestableció la reclusión, que sin embargo no quedada firme hasta que no interviniera el máximo tribunal.
Natalia Melmann tenía 16 años cuando el 4 de febrero de 2001 fue secuestrada luego de salir de bailar de un boliche de Miramar. Su cuerpo fue encontrado en un vivero cuatro días después y por el caso también fue condenado a 25 años de prisión Gustavo Fernández, como el “entregador” de la joven.