Surge de su nueva presentación ante la Oficina Anticorrupción. Así es, a diferencia de su Declaración Jurada Patrimonial correspondiente a los años 2009 y 2010 donde afirma haber adquirido el auto Honda Civic CRX del Sol modelo 1992 el 1º de julio de 1992, en su nueva DJP dice haberlo adquirido el 8 de noviembre de 1993.

La denuncia que presentáramos en la Justicia Federal el 21 de mayo pasado, respecto a la adulteración maliciosa de datos en la Declaración Jurada Patrimonial del año 2010, era cierta. Lo dice Amado Boudou en su nueva presentación. A confesión de parte, relevo de prueba.

Fraguar la fecha de compra del auto Honda Civic CRX del Sol modelo 1992 ante la Oficina Anticorrupción , constituye en si mismo un acto que desacredita al vicepresidente. Pero si este acto constituye la prolongación de una falsificación anterior, por la cual quiso despojar a su ex esposa de un “bien ganancial” que por derecho le correspondía; estamos ante un acto de inmoralidad privada extendida al terreno de lo público.

Con este caso salta a la vista que Amado Boudou es capaz de mentir, falsificar o adulterar información, incluso en aquellas cuestiones donde la prueba documental es incontrastable. Agravado, además, porque lo hizo ante la Oficina Anticorrupción. E indecente si solo persiguió acrecentar su patrimonio personal a expensas de los de su ex mujer.

Quien puede actuar de esta manera, no es acreedor de ninguna confianza. Si pensamos que el cargo que ostenta, por imposición de la ley de ética de la función pública exige: “honestidad, probidad, rectitud, buena fe y austeridad republicana”; observamos que el vicepresidente no cumple con ninguno de estos atributos.

Todas sus afirmaciones entran en un cono de sospecha. Desde su desconocimiento de personas muy cercanas a su entorno hasta su negación de vínculo alguno con actos de tráfico de influencias penados por la ley. Desde sus denuncias sobre funcionarios públicos hasta sus acusaciones sobre personalidades de la actividad privada.

Amado Boudou es una carga negativa para la Democracia , las Instituciones y el propio Gobierno. Ojala alguien reflexione sobre esta realidad.

De nuestra parte volveremos a la Justicia.
ACLARACIÓN: La opinión vertida en este espacio no siempre coincide con el pensamiento de la Dirección General.