“El gremio de Camioneros va a acompañar la movilización de octubre”, afirmó Moyano en una conferencia de prensa en la sede de la CTA junto a Micheli, aunque aclaró que “por el momento” sólo se plegará a la marcha y no el paro nacional que también incluye la jornada de protesta.

El encuentro fue calificado de “histórico” por Micheli y se produjo en medio de un acercamiento al líder camionero, a partir de su ruptura de relaciones con la Casa Rosada, y el impulso de una agenda coincidente de reclamos al Gobierno.

Moyano destacó que se trató de la “primera reunión” entre la CGT y la CTA -en rigor, de las facciones opositoras de las dos centrales obreras- y celebró “el comienzo de una relación que se va a profundizar”.

El primer paso concreto será la participación del gremio que maneja su hijo Pablo Moyano, quien tras la rueda de prensa confirmó que movilizará a decenas de miles de afiliados a su organización, por lo cual el normal funcionamiento de ese sector se verá afectado.

“Nos quieren municipalizar la recolección de basuras, nos quieren sacar todo, así que vamos a ir con todo a la Plaza”, confió Pablo Moyano a un grupo de periodistas apenas finalizada la conferencia.

Por su parte, el camionero no descartó que más organizaciones de su CGT se sumen a la marcha a las puertas de la Casa Rosada, entre ellos el SUTPA, sindicato de empleados de Peajes, que lidera su otro hijo y diputado, Facundo Moyano, quien adelantó que lo más probable es que adhiera a la movilización.

A esa movilización de la CTA ya comprometieron además su presencia organizaciones como la Federación Agraria Argentina (FAA), la FUA, la FUBA, la CCC, Barrios de Pie y Movimiento Socialista Teresa Vive (MST).

Minutos después de las 17 Moyano llegó a la sede de la CTA de la calle Lima al 600, junto con sus hijos Pablo y Facundo, y fue recibido al pie del ascensor por Micheli, quien lo saludó con un “Hugo querido” acompañado de un abrazo.

Poco antes habían arribado otros integrantes del Consejo Directivo de la CGT, como Juan Carlos Schmid, y el secretario adjunto Guillermo Pereyra, mientras que con la reunión empezada llegaron Gerónimo Venegas y Julio Piumato.

Micheli estuvo acompañado por los miembros de la mesa de conducción de su CTA, entre ellos José Rigane y Hugo “Cachorro” Godoy.

El dirigente destacó las coincidencias entre su CTA y la CGT moyanista en torno a los reclamos para los trabajadores, entre los que mencionó la eliminación del impuesto a las ganancias, la universalización de las asignaciones familiares, el pago del 82 por ciento móvil para jubilaciones y el rechazo al trabajo en negro y tercerizado.

“Coincidimos sobre la situación del país y los problemas de los trabajadores y compartimos como se pueden encarar y resolver esos problemas”, agregó el estatal.

Por su parte, Moyano advirtió que “no es fácil coincidir en una marcha conjunta después de muchos años de desencuentros” entre las centrales obreras enfrentadas.

Además desmintió haber mantenido una postura en contra de que la CTA reciba la personería gremial que aún espera: “Las organizaciones que defienden a sus trabajadores no pueden tener temor a otra organización”, argumentó.