Un centro de estudios uruguayo estimó que se reducirá un 6,5% la llegada de turistas al país vecino durante la próxima temprorada. Las trabas cambiarias locales y la desaparición de la aerolínea Pluna, entre las causas.
Sigue sin modificarse el panorama incierto para el turismo en Uruguay, consecuencia del mantenimiento de las restricciones a la compra y venta de moneda extranjera. Un informe realizado por el Centro de Investigaciones Económicas (Cinve), una entidad académica privada charrúa, proyectó que el país vecino no alcanzaría el mismo número de visitantes registrado en la temporada 2011-2012, pese a la cotización alternativa del “dólar celeste” y las medidas impositivas de incentivo que podría alentar el turismo argentino.
De esta manera, el estudio establece que el cepo cambiario, sumado a la incertidumbre de la economía regional y a la quiebra de la aerolínea Pluna, tendrán como consecuencia una retracción del 6,5% de las visitas argentinas a Uruguay, según informa el diario El Observador
Las trabas cambiarias, de acuerdo a una simulación realizada por el Cinve, desincentivarán a “aproximadamente 30.500 argentinos” que tengan interés en viajar a Uruguay, debido al aumento de costos derivados de los controles. Si no existiera el cepo a la moneda extranjera, habría alrededor de 1.070.00 turistas desde Argentina.
La ausencia de la aerolínea Pluna, por su parte, también tendrá un impacto negativo en la economía uruguaya. El Cinve afirma que la reducción de la conectividad será “un obstáculo adicional a la llegada de turistas, ya no sólo argentinos y brasileños sino de otras nacionalidades”. Las viajes, que son substituídos por otras aerolíneas, tienen precios “sensiblemente” más caros que aquellos que proveía la firma que quebró.
La caída proyectada en el sector turístico de la república radicada en el márgen oriental del Río de la Plata también se manifiesta por otro flanco. Según las estimaciones, a la baja del 6,5 de los turistas argentinos se le agregará el desplome del orden del 6,2% interanual de los visitantes brasileros.
El gobierno de José “Pepe” Mujica, intentando anticiparse a la situación y como forma de morigerar la retracción de la llegada de turistas, lanzó el mes pasado un paquete de medidas impositivas que buscan atraer tanto a los turistas argentinos -que constituyen el 70% de los visitantes- como otros viajeros de la región.