En una entrevista telefónica concedida a Ruben Ferrari, la funcionaria detalló: “me enteré de la existencia del escrito a través de un periodista e inmediatamente concurrí a buscarlo para saber que se decía de mí”.“La misiva – continuó – llevaba por fecha 5 de noviembre, pero recién ingresó el 20 de este mes, ya que, según me comentaron, en el medio llamaron a su autora para que modificara algo”.

Luego, respecto del contenido, Felices puntualizó: “se refiere específicamente a la recomendación de la utilización de las motos secuestradas en reemplazo de los carros con caballos; ella niega haberla hecho, pero desconociendo que nunca dije algo así, pues siempre me hago cargo de lo que digo y de lo que firmo”.En idéntico sentido, remarcó: “Arza, Azcona y yo tenemos expedientes distintos sobre los cuales trabajamos hasta llegar a una conclusión. Pero lo que dice la defensora es que, por ser la titular, tiene la posibilidad de solicitar el expediente, hacer una elevación y manifestar que no está de acuerdo si cree que raya con el ridículo o la ilegalidad”.

“Además – prosiguió – tampoco ha dicho que mi recomendación fue enviada a sola firma porque ella se ausentó por enfermedad durante diez días y no se tomó licencia… Lo curioso es que, cuando regresó a la oficina, sí pidió ser reemplazada por Azcona por una día, ya que debía viajar a Villa Gesell a brindar una charla”.

Y subrayó: “esto es particularmente raro, sobre todo porque falta a la verdad al afirmar que me notificó o me llamó por teléfono”.A colación, en tanto, Felices manifestó: “si esto se ha hecho público no es por responsabilidad mía. Y si en su momento ella no estaba para firmar, no correspondía que trasladara a su casa actos administrativos del Estado, como sugirió; es un disparate”.Asimismo, consideró: “creo que esta historia se basa en un problema personal; no quiero pensar que se trata de un armado. Pero me ofende que asuma que afecto la paz social por no criminalizar la protesta de los cartoneros… considero que si a la gente no le gusta mi propuesta tiene derecho a manifestarse; vivimos en democracia”.De igual modo, analizó: “esta mujer ha señalado, por otra parte, que maltrato al personal, cuando en realidad es ella la única defensora que ha sido denunciada por esa causa por una empleada, Rosana Tortosa, quien ya no está más con nosotros”.Al respecto, también contó: “Arza no ha tenido problemas sólo conmigo; también los tuvo con el Dr. Vespa, una persona cálida que, desde que nos conocimos en la Defensoría, me permitió entablar una relación buenísima, basada en el respeto y el sentido común, tal como que la que tuve con Rodríguez”.Más adelante, retomando el tópico anterior, Felices resaltó: “en marzo próximo cumpliré diez años dentro del área, ocupando un lugar para el cual fui elegida en dos oportunidades por las sociedades de fomento y con la mayor cantidad de votos”.

“Por ende – reparó – entiendo que si se pone en tela de juicio mi idoneidad para el cargo se está desacreditando también a la asamblea que confió en mi capacidad”.Sobre ese punto en particular, explicó: “creo que todo viene desde la última elección, cuando el Concejo Deliberante tuvo que llevar a cabo más de una sesión por la falta de acuerdo y porque nadie juntaba votos para ser titular”.

“Incluso – añadió – había concejales que querían cambiar la ordenanza. El sueño de ella es que la Defensoría sea unipersonal, ya que su mayor inconveniente surge hoy porque pretende tratar como secretarios a quienes fuimos electos como defensores del pueblo”.

Sin embargo, Felices se ocupó de aclarar: “quiero dejar tranquila a la ciudadanía; nosotros debemos trabajar para lo cual nos eligieron sin importar cómo nos llevamos. En consecuencia, lo que ella haga contra mí no me suma ni me resta, aunque reconozco que le hace mal a la institución”.

“Es por eso que, aunque lamento que esta señora haya elegido el camino de la publicidad para hacerme daño, quiero que tomen esta suerte de denuncia, investiguen lo que haya que investigar y den una devolución”, exigió.

Y completó: “siempre digo que el que me ensucia, me limpia… así que invito a quien quiera a ver mi trabajo de cada día, en virtud de que no tengo nada que esconder y mucho menos algo que pueda manchar mi prestigio”.Por último, consultada por los pasos a seguir, Felices respondió: “haré lo que dice la ordenanza, es decir, esperaré a que me notifiquen fehacientemente desde el Concejo para luego hacer un descargo de todas las imputaciones que se me han hecho y, a la vez, agregar un montón de cosas”.

“Antes de que sucediera todo esto, años atrás incluso, he presentado una nota que no se trató jamás; quizás ahora consiga que lo hagan”, aseveró.

Al finalizar, en tanto, apuntó: “en definitiva, me voy a someter a la Comisión de Legislación, que es la que controla a los defensores, y si sus miembros consideran que me deben hacer un juicio político, compareceré públicamente, sin problemas”.“Lo que no voy a tolerar de ninguna manera es que alguien me destrate y me maltrate”, remató.