El apoderado de Consumidores Libres, Héctor Polino, advirtió hoy que el aumento de tarifas que anunció el Gobierno para la electricidad y el gas “tendría que ser aprobado por el Congreso”, mientras que especialistas del sector alertaron que “la política energética del modelo kirchnerista hace agua por todos lados”.
“Los anuncios realizados de aumento a la energía eléctrica y gas natural, bajo el eufemismo de un cargo específico, es en realidad un impuesto y como tal tendría que ser aprobado por el Congreso Nacional”, remarcó el ex diputado socialista.
Por su parte, el ex secretario de Energía (2001) Emilio Apud consideró que la nueva medida del Ejecutivo nacional representa un “parche” y demandó “una política de largo plazo y sincerar esta ficción que es la política kirchnerista”.
Polino señaló además que “las obras ahora anunciadas debieron haber sido realizadas y financiadas por las empresas concesionarias de la energía eléctrica y del gas natural” porque “esas empresas, no sólo tuvieron ingresos vías tarifas que pagaron los usuarios, sino además, subsidios que abonó el Estado”.
“Es necesaria la convocatoria a audiencias públicas, con la participación de todos los sectores interesados, incluidos en primer lugar los usuarios que son los que van a tener que pagar los aumentos tarifarios”, reclamó.
Apud calculó que “las inversiones maduran recién a los quince o veinte años”, por lo que reiteró que se requiere “una política de largo plazo”.
El ex secretario de Energía criticó también el nivel de las tarifas para el sector y reclamó “sincerar esta ficción que es la política kirchnerista de no darle a las cosas el valor que cuesta”.
El especialista indicó que los recientes incrementos son un “parche” que “puede servir para comprar algún tipo de equipamiento de mantenimiento para las redes de distribución para el caso de la electricidad”.
“En el caso del gas no se a dónde lo van a direccionar, porque no creo que lo vayan a poner en las redes cuando no hay mucho gas para poner y el principal problema sería conseguir proveedores para la importación”, evaluó.
En tal sentido, Apud advirtió que la Argentina “no puede dejar de consumir gas” y vaticinó que por la falta de producción local el país continuará aumentando sus importaciones: “Si seguimos así vamos a un horizonte del 100 por ciento de importación”.
El Gobierno dispuso ayer un aumento de tarifas de entre cuatro y 150 pesos para la electricidad, y de entre cuatro y 60 pesos para el gas, con el objeto de financiar dos fondos para realizar obras de infraestructura, de mil millones de pesos cada uno, y mejorar el servicio.
Las subas entrarán en vigencia a partir de este mes, serán bimestrales y abarcarán los servicios prestados por las empresas Edenor y Edesur, en el caso de la electricidad, y por todas las gasíferas del país.