Lo que cuesta vale. Y cómo le costó a Peñarol poder doblegar a Unión en la final del año. En un partido muy intenso, jugado a gran ritmo y de trámite cambiante, el “Milrayitas” dio vuelta el marcador en el segundo tiempo y consiguió el triunfo en el tercer juego por 63 a 56. Así, se coronó campeón del básquet marplatense luego de casi diez años.

La final estuvo fragmentada en dos: el primer tiempo fue para Unión y el segundo para Peñarol. El gran mérito para los de, anoche, Osvaldo Echeverría fue recomponerse tanto en el juego como en el resultado para dar vuelta una historia que empezaría adversa. Además, contó con la gran aparición de Nicolás Giménez desde el banco, quien aportó 18 puntos y 11 rebotes, siendo elegido el jugador más valioso.

Ante un gran marco de público de ambos elencos en el Domingo Robles, el partido inició con mucha paridad. El local sacó una brecha de luz con un parcial de 7 a 2 gracias a un triple de Gastón Roldán, un doble de Ramiro Ciganek y dos libres de Lisandro Ciarlotti.

Sin embargo, el “Celeste” volvió a ponerse en juego gracias a Máximo Vighi (4). Además, dos triples de Leonel Bruera le dieron la ventaja en el primer período a los del “Gallego” De Paz por 14 a 11.

Unión se afianzó en defensa y no le permitió correr la cancha a Peñarol, una de sus mayores virtudes. Al mismo tiempo, encontraba más espacios en ataque, movimiento de pelota y penetraciones.  El actor principal de ese trámite fue Máximo Vighi, autor de 10 puntos en el segundo cuarto.

En Peñarol, Nicolás Giménez tuvo un buen ingreso al juego ya que anotó 5 unidades y tomó 4 rebotes, dos en ataque. Además, sacó tres faltas que pusieron a su rival en penalización. De todas formas, la visita ingresó al descanso largo con ventaja de 8 puntos y un claro dominio en el juego.

No obstante, el “Milrayitas” sacó a relucir todas sus virtudes para revertir la historia. Lo primero fue evidenciar un cambio en la actitud defensiva. En cancha estuvieron cinco campeones argentinos U19 como Andrés Mateo, Ramiro Ciganek, Nicolás Madrid, Julián Morales y Nicolás Giménez. Por eso, los pibes junto a Tomás Sirochinsky, Emiliano Jaime y Ciarlotti se combinaron para imprimir intensidad y presión defensiva.

Por otra parte, el dueño de casa, con la seguridad de que no recibiría muchos puntos, arriesgó en ataque, se pasó la pelota y pudo encontrar a Giménez en el poste bajo. Así, el pivot logró materializar 9 puntos en el tercer cuarto. También fue importante el trabajo de Nicolás Madrid quien sumó 7 unidades en el período y sacó faltas con sus rompimientos.

Así, Peñarol consiguió meter un magistral parcial de 20 a 4 para descontar, empatar el juego y ponerse por delante. Unión reaccionó sobre el final con tres libres de Bruera y un doble de Valentín Blanco Vecchi. El parcial fue decisivo porque favoreció al “Milrayitas” por 20 a 9.

El último cuarto encontró un ritmo incesante en ambos equipos, tanto para defender como para moverse en ataque buscando espacios. Peñarol se dedicó a mover la pelota por todo el frente de ataque para, no sólo abrir la defensa, sino también desgastar al rival y que cuando fuera a atacar tenga menos piernas y aire. Y la apuesta resultó.

Unión cayó en un monólogo de Bruera (6) para que llegue al total de 20 puntos. Enfrente, Peñarol encontró 5 puntos en Ciganek, 6 en Madrid, 4 en Giménez y 2 en Mateo.

Peñarol trabajó el partido con inteligencia y sacrificio para quedarse con el título. Supo cambiar a tiempo, tuvo actitud, estrategia e ideas y, por eso, mereció festejar el campeonato de Mar del Plata ante el siempre difícil Unión.

-Síntesis-

Peñarol (63): Gastón Roldán 3, Ramiro Ciganek 11, Nicolás Madrid 15, Emiliano Jaime 2 y Lisandro Ciarlotti 11 (FI) Tomás Sirochinsky 0, Andrés Mateo 4, Julián Morales 0 y Nicolás Giménez 18. DT: Osvaldo Echeverría.

Unión (56): Valentín Blanco Vecchi 11, Sergio Verfaile 0, Máximo Vighi 16, Leonel Bruera 20 y Nicolás Grosse 2 (FI) Federico Espínola (x) 1, Felipe Sampedro 1, Mariano Bassino 3 y Martín Romairone (x) 2. DT: Norberto De Paz.

Parciales: 11-14, 15-20, 20-9 y 17-14.

MVP: Nicolás Giménez, de Peñarol.

Árbitros: Aquino, Leguizamón y Pereira.

Estadio: Domingo Robles de Peñarol.

Fuente: Los Martines