El Ministerio de Agricultura de la Nación decretó este lunes el estado de emergencia agropecuaria entre el 1 de enero y el 30 de junio de 2012 y el estado de emergencia o desastre agropecuario desde el 1 de julio hasta el 31 de diciembre.
Lo hizo a través de la publicación en el Boletín Oficial de la Resolución 1372/2012 de la ley 26.509 que está orientada a brindar asistencia técnica, financiera e impositiva para los productores que fueron afectados por la sequía durante el pasado año y que apunta a las explotaciones agropecuarias de trigo, cebada y avena, pasturas perennes, cultivos forrajeros y doble propósito de verano y ganadería de cría bovina.
Para convertirse en beneficiarios, los productores tendrán que presentar un certificado expedido por las autoridades competentes de la Provincia que confirme que sus predios se encuentran comprendidos por la declaración de emergencia.
“Las instituciones bancarias nacionales, oficiales o mixtas y la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) arbitrarán los medios necesarios para que los productores agropecuarios comprendidos en la presente resolución gocen de los beneficios previstos”, expresa el comunicado.