Las calles de la capital francesa se llenaron de ciudadanos que están en contra del proyecto de ley que permitiría el matrimonio entre homosexuales y la adopción adopción de niños. La iniciativa, impulsada por el gobierno en noviembre, tendrá tratamiento en el Parlamento a partir de fin de mes.
La marcha, convocada por la plataforma “Manif pour tous”, comenzó poco después del mediodía francés desde tres puntos distintos de la capital con destino a la explanada del Campo de Marte, a los pies de la Torre Eiffel.
Esta protesta sigue a las manifestaciones regionales iniciadas en noviembre por esa misma plataforma, contraria a que la unión entre homosexuales sea llamada matrimonio y a que se extienda a las personas del mismo sexo la filiación, y que quiere que el presidente francés, François Hollande, someta el texto a referendo.
Según trascendió, se alquilaron más de 900 autocares para facilitar la llegada a París de los manifestantes, que tienen la consigna de desfilar sin eslóganes individuales de partidos políticos u organizaciones religiosas.
Una de las promotoras, la cofundadora de “Manif pour tous” y humorista Frigide Barjot, aclaró la manifestación no es homófoba sino que defiende la preservación de los derechos de los niños al garantizar que de manera legal sigan figurando como progenitores un hombre y una mujer.
“Transmitimos un mensaje de fraternidad para todos. Para los adultos, pero sobre todo para los niños del futuro”, indicó en la cadena BFM TV, en la que insistió en que ese proyecto de ley no sea votado antes de que todos los franceses hayan sido informados con detalle y puedan dar su opinión.
La petición de que sea sometido a referendo le llegó también a Hollande en una iniciativa firmada por 115 parlamentarios del partido conservador Unión por un Movimiento Popular (UMP), para quienes un proyecto “que trastoca de manera tan profunda los principios que fundan la sociedad no puede hacerse por ley ordinaria”.