El ministro alemán de Cooperación, Dirk Niebel, afirmó que todo ese alimento no debe ser desechado. “Hay 800 millones de personas con hambre en el mundo”, advirtió.
“Más de 800 millones de personas pasan hambre a nivel mundial. En Alemania también hay familias que no tienen suficientes recursos para comprar productos alimenticios de buena calidad”, aseguró el ministro alemán de Cooperación Económica y Desarrollo, Dirk Niebel.
Es más, afirmó que sería irresponsable tirar la comida sólo por una etiqueta falsa. Es que en toda Europa se desató la polémica por la venta de alimentos de carne de caballo que llevaban la etiqueta de carne de res.
Sin embargo, dicha propuesta despertó fuertes críticas por parte de sus colegas del Gobierno que la consideran “inhumana, indigna y cínica”. “Cada persona debe saber qué está comiendo, sea rica o pobre”, indicó la ministra de Asuntos Sociales, Ursula von der Leyen.
Las autoridades de Irlanda encontraron hasta 30% de carne de caballo mezclados en las hamburguesas comercializadas en cinco cadenas de supermercados, entre ellas Tesco, Aldi y Lidl, y encendieron la alerta. Había también pequeños restos de carne de cerdo.
Similar situación se descubrió en Francia, donde proveedores locales asociados a la marca Findus se querellarán contra proveedores rumanos por encontrar en sus alimentos envasados carne de caballo en lugar del vacuno anunciado en las etiquetas de los platos preparados para Findus.