El mandatario provincial habló de diferencias con el gobierno nacional y descartó que tanto él como su esposa, Karina Rabolini, vayan a postularse para los próximos comicios legislativos.
El gobernador bonaerense, Daniel Scioli, advirtió que hay una “brecha” entre la presidenta Cristina Fernández y él, que “a veces se agranda más” producto de “algunos fanáticos” del kirchnerismo, en alusión a quienes lo desafiaron la semana última a responder si permanece o no alineado con la jefa de Estado.
Scioli, quien mantiene una relación tensa con la primera mandataria desde que manifestó sus aspiraciones presidenciales, no negó movimientos destituyentes en su contra y agradeció a los partidos de Francisco De Narváez, de Margarita Stolbizer y “a los radicales” porque “tuvieron una actitud responsable cuando vieron un límite a la gobernabilidad”.
Además, rechazó la posibilidad de presentarse como candidato testimonial como en 2009 en las próximas elecciones legislativas y negó que tenga previsto impulsar la postulación para esos comicios de su esposa y primera dama provincial, Karina Rabolini.
“En este momento, veo una brecha que, a veces, se agranda más entre algunos fanáticos que buscan sobreactuar en todo momento, agradar de cualquier manera; no me refiero a nadie en particular y, después, las decisiones las va tomando ella”, respondió Scioli consultado sobre sentía que su relación con la presidenta atravesaba el peor momento.
La semana última, desde el kirchnerismo, la diputada nacional Diana Conti y los ministros Julio De Vido y Florencio Randazzo desafiaron al gobernador bonaerense a que responda si continúa o no alineado con la primera mandataria.
“Debe acatar las órdenes de quien conduce el proyecto, que es Cristina Kirchner”, advirtió en alusión a Scioli Conti, la más crítica del gobernador bonaerense, y alertó que el ex motonauta “perderá” si no se “alinea” con la Casa Rosada.
El mandatario provincial, en sendas entrevistas publicadas hoy por los diarios Clarín y Tiempo Argentino, replicó: “Pongo mi prudencia y mi serenidad en medio de tanta imprudencia”.
Al ser preguntado sobre si veía movimientos destituyentes en su contra, se limitó a contestar: “Siempre fui defensor de la institucionalidad. Si a alguno se le pasa por la cabeza cualquier locura … Yo quiero llevar tranquilidad en estas Pascuas. La gente sabe que estoy enfrentando distintas situaciones y dice: ´Encima de que se tiene que ocupar de la droga y de la seguridad, van y lo atacan´”.
“Agradezco a De Narváez, a Stolbizer y a los radicales, que fueron críticos conmigo pero que también, cuando vieron un límite a la gobernabilidad, tuvieron una actitud responsable”, contrastó. Consultado sobre si será candidato testimonial como en 2009 en las próximas elecciones legislativas, respondió: “En ese momento, hubo circunstancias muy particulares en las que el ex presidente Néstor Kirchner pensó y planificó una estrategia electoral para defender el proyecto”.
“Eso no tuvo el acompañamiento ni el resultado de triunfo esperado”, recordó y añadió: “Nosotros tenemos responsabilidades que la Constitución nos marca hasta 2015, tanto ella (por la jefa de Estado) como yo”, completó.
Por último, Scioli, al preguntársele si le pedirá a su esposa que se presente en las próximas elecciones legislativas, respondió: “No; es otra de las pavadas que también se dicen. Ella tiene su trabajo (como empresaria) y aparte preside la Fundación del Banco (de la Provincia de Buenos Aires)”.