Fue durante una misa celebrada hoy en la Plaza San Pedro del Vaticano. “En particular los niños son uno de los grupos más vulnerables”, sostuvo el Sumo Pontífice.
El Papa denunció este domingo los “abusos” cometidos contra niños, sin indicar si se refería a los casos de pedofilia que han desacreditado a la Iglesia Católica, durante una misa celebrada este domingo en la plaza San Pedro del Vaticano.
Mando “un saludo especial a la asociación Meter”, una ONG religiosa que lucha desde hace más de 20 años contra todo tipo de abuso, incluido el abuso sexual, cometido contra niños, dijo el Papa durante la misa dominical.
“Quisiera asegurar (a las personas victimas de abusos) que están presentes en mis oraciones, pero quisiera también subrayar con fuerza que debemos comprometernos todos para que todas las personas, y en particular los niños, que son uno de los grupos más vulnerables, sean siempre protegidos y defendidos”, añadió el pontífice.
Hace un mes, Francisco instó a luchar “con determinación” contra los curas pedófilos y confirmó la línea de rigor adoptada por su predecesor Benedicto XVI contra uno de los escándalos que más han desacreditado a la Iglesia católica.
El pedido del pontífice latinoamericano fue hecho al prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, monseñor Gerhard Muller, encargado de tales denuncias.
“El Santo Padre recomendó en particular que se continúe con la línea de su predecesor Benedicto XVI de actuar con determinación en los casos de abusos sexuales”, había informado en un comunicado el Vaticano.
Fue la primera vez que el pontífice argentino se pronunció sobre las miles de denuncias en todo el mundo contra curas pederastas y que afectaron gravemente en el último decenio el prestigio de la milenaria institución.
Por otra parte, en la misa que celebró el papa este domingo en la plaza San Pedro del Vaticano participaron miles de integrantes de hermandades de todo el mundo. Esta misa se enmarca dentro de la celebración de la Jornada de las Hermandades y de la Piedad Popular.
“No se conformen con una vida cristiana mediocre, que su pertenencia (a una hermandad) sea un estímulo, (...) para amar aún más a Cristo”, dijo el Papa a los miembros de las hermandades y a los fieles que acudieron a la celebración de esta misa a pesar del mal tiempo y la lluvia.
“Tienen una misión específica e importante, mantener viva la relación entre la fe y las culturas de los pueblos, a través de la piedad popular”, recordó el papa argentino.
El sumo pontífice instó a las hermandades que se mantengan “activas”, desempeñando el papel de “auténticos evangelizadores”.