Los dirigentes autonomistas de la Carpa de la Esperanza que habían sido recibidos por el vicegobernador Gabriel Mariotto semanas atrás en La Plata, volvieron ayer a hablar con el funcionario por el proyecto de autonomía que vienen motorizando.
Encabezados por Matías Afife y Rosana Serrano, los quequenenses tuvieron la posibilidad de mostrarle a Mariotto el sector en el puerto donde están ubicados y, además, fueron invitados a compartir una comida que se sirviera en el Consorcio de Gestión luego del acto.
“Conozco las expectativas, escuchamos todos los reclamos y se puede ayudar con la ingeniería institucional para que tengan la posibilidad de cumplir con los objetivos que plantean, sin afectar los intereses de nadie”, expresó Mariotto.
El funcionario se mostró partidario de “escuchar mucho a los ciudadanos”, dijo que “no es conveniente partir de preconceptos”, entendiendo que “todos los pedidos de autonomía no son iguales, porque hay situaciones objetivas que los hacen viables en algunos casos y en otras no es así”.
Agregó que “son 135 distritos los de la Provincia de Buenos Aires y las realidades son distintas”, para considerar que “hay que evaluar el impacto de esos objetivos, porque pueden ir en detrimento de otros intereses”.
Las tierras
Al aludir a la posibilidad de tomar tierras de otro territorio (en este caso Lobería), reconoció que “siempre que hay una acción institucional, es probable que alguno pueda verse afectado; hay que ver el impacto de esto y, por esa razón, es necesario escuchar bien la propuesta y su viabilidad”.
Mariotto sostuvo que “el Estado debe armonizar los intereses”, insistiendo en que “la creación de nuevos distritos debe representar un beneficio para los ciudadanos y esto no ir en detrimento de otros, por eso debe analizarse todo bien”, para comentar que “hay que ver qué significa para Necochea, para Lobería y para el nuevo municipio”.
Destacó que “es importante interactuar con los ciudadanos” que forman parte del movimiento autonomista y dijo que “una vez que se realice un análisis serio debe tomarse una decisión”.
Respecto de los proyectos de leyes que tienen estado parlamentario, aclaró que “no es cuestión de tiempos materiales, sino de reflexión y argumentación”, manifestando que “no se trata de contar con las manos necesarias para votarlo, tanto a favor como en contra, porque lo significativo es que sea una construcción positiva para todos”.
Fuente: Ecos diarios