Micheli se diferenció del acto por el 25 de Mayo que organizó el kirchnerismo al afirmar que “somos menos, pero más dignos” y en un mensaje que pareció dirigido a Moyano, quien esta vez evitó sumarse a la convocatoria, señaló que “no vamos a especular si este es un año electoral o no para salir a la calle a luchar”(FOTOS)
La CTA disidente que encabeza Pablo Micheli, realizó un paro nacional con movilización a la Plaza de Mayo, denunció “el ajuste y la corrupción” del gobierno nacional y se diferenció del acto por el 25 de Mayo que organizó el kirchnerismo al afirmar que “somos menos, pero más dignos”.
Sin el acompañamiento esta vez de la CGT opositora de Hugo Moyano, que envió a la plaza a una columna de camioneros, y en coincidencia con el 44 aniversario del Cordobazo, la CTA concretó un nuevo paro nacional con al menos cien cortes de ruta en todo el país y con movilizaciones en todas las provincias frente a los ministerios de Trabajo.
En un mensaje que pareció dirigido a Moyano, quien esta vez evitó sumarse a la convocatoria para dedicarle el tiempo al armado con vistas a los comicios de octubre, Micheli señaló que “no vamos a especular si este es un año electoral o no para salir a la calle a luchar”.
“Abandonar la calle no es el camino correcto, pero no hay ruptura entre la CTA y la CGT. Moyano cree este año que hay que estar concentrado en la disputa electoral y yo no”, enfatizó Micheli, quien admitió que “podemos ser menos que la otra vez, y mañana podemos ser más”.
En esta capital y en el conurbano los cortes de calles se registraron en el centro porteño (avenidas De Mayo y 9 de Julio; Corrientes y Callao), mientras que manifestantes bloquearon el tránsito en el puente Pueyrredón, que une la zona sur del conurbano con la Capital Federal, y comenzaron bloques en la autopista Buenos Aires-La Plata.
También, se realizó un corte de ruta en un sector de la autopista Panamericana con el cruce de la ruta 202, en la localidad bonaerense de Don Torcuato; y en la zona de Constituyentes y avenida General Paz, en el límite entre la ciudad de Buenos Aires y el partido bonaerense de San Martín.
Momentos antes del acto en Plaza de Mayo, la Policía Federal instaló un vallado sobre Diagonal Sur y Belgrano, custodiado por un camión hidrante y varios móviles y cuerpos de la Guardia de Infantería, para evitar que una columna de camioneros se topara con manifestantes del gremio oficialista UPCN, que vivaban a la presidenta Cristina Fernández mientras encabezaba un acto en la secretaría de Comercio Interior, a pocos metros del epicentro de la protesta.
El estatal justificó el paro en la “falta de diálogo del Gobierno con los trabajadores y en el reclamo por ”la quita del Impuesto a las Ganancias, la universalización de las asignaciones familiares, paritarias sin techo y el 82 por ciento para todos los jubilados“.
De la protesta participaron empleados públicos enrolados en la opositora ATE, la Corriente Clasista y Combativa (CCC), la Federación Agraria (FA), la FUBA, camioneros, el SUTEBA, Barrios de Pié, Visitadores Médicos, el Polo Obrero, la CONADU Histórica, Marítimos, AMAR, la UCRA, el Partido Socialista de los Trabajadores (PST) y el Movimiento Teresa Vive, la Federación Campesina y Pueblos Originarios, entre otros.
De espaldas a la Casa Rosada, sobre un escenario ”mas humilde que el del sábado pasado“, argumentó Micheli, media docena de oradores fustigaron con dureza a la administración Kirchnerista.
Por su parte el titular de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi, embistió contra del oficialismo al expresar que en el Congreso están por ”aprobar a mano alzada, al nuevo indulto“ por la media sanción de la Ley de blanqueo de capitales.
”Hubo un indulto en los 90, fue el indulto a los genocidas con la Ley de punto final a los que cometieron atrocidades“ y enfatizó que ”en este momento en el Congreso nacional popular y progresista se esta consumando el indulto a la joda, a la corrupción por parte de los legisladores kirchneristas“.