Francisco advirtió durante el Angelus en la plaza San Pedro que el Evangelio “no autoriza absolutamente el uso de la fuerza para defender la fe” y lanzó además un nuevo llamado por la paz en Egipto.
“El Evangelio no autoriza el uso de la fuerza. Es lo contrario, la verdadera fuerza del cristianismo es la fuerza de la verdad y del amor, que implica renunciar a toda violencia”, destacó, según reproduce la agencia Ansa.
“Fe y fortaleza en cambio, van juntas”, explicó el Pontífice, que repitió dos veces su advertencia contra la asociación entre fe y violencia.
Jorge Bergoglio leyó una parte del Evangelio en la cual Jesús dice a los discípulos: “Piensan que vine al mundo a traer paz sobre la tierra. Qué significa ésto que la fe no es ornamental, la fe implica elegir a Dios como criterio base de la vida y Dios no es vacío, no es neutro”.
“Por esto, -prosiguió el Pontífice-, Jesús dice vine a traer división, no es que Jesús quiera dividir a los hombres entre ellos, al contrario: Jesús es la paz, es la reconciliación”, pero renunciar al mal y elegir el bien, “divide, lo sabemos, divide incluso los vínculos más estrechos”.
“Estas palabras del Evangelio -subrayó, en su advertencia contra la violencia en nombre de la fe- no autoriza en absoluto el uso de la fuerza”.
Además, Francisco lanzó un nuevo llamado por la paz en Egipto.
“Seguimos orando por la paz en Egipto. Recemos junto a la Reina de la Paz”, dijo Jorge Bergoglio ante la multitud.
En la Plaza San Pedro había este domingo miles de personas presentes, tanto turistas como de Roma, y eran numerosos, como siempre, los carteles con mensajes afectuosos para el Papa.