El malviviente entró armado y les ordenó a los presentes que se arrojaran al piso. El dueño obedeció y el cliente por el temor de la situación quedó paralizado. Sin mediar palabras le disparó en el estómago y se dio a la fuga en una moto.

Aguirre era obrero de un astillero de la zona y todas las tardes después del trabajo pasaba por el comercio porque conocía a Néstor el dueño del negocio.

El comerciante aseguró que el delincuente que baleó a Aguirre es el mismo que hace un mes también lo asaltó y añadió que durante el año pasado fue víctima de cuatro robos.

Según la Policía el asesino estaría individualizado y sería aprendido en las próximas horas.