Además, manifestó: “El último hecho fue de madrugada, pero ya no hay hora para los asaltos. De día y de noche, los taxis y los remises somos el cajero automático de los delincuentes”.

“No vemos que hagan algo sobre esto. Las empresas de taxis tenemos los registros de los asaltos y se da de manera permanente. No vemos un cambio ni que alguien haga algo”, agregó.

Por otra parte, aseguró: “Ya no hay problema, los delincuentes no tienen pudor. Nos roban a cara descubierta. Cada tanto hay golpes a los choferes, no basta con amenazas, sino lastiman físicamente”.

“El objetivo es llevarse el dinero, pero a veces, cuando pueden, también se llevan el auto que es nuestro medio de trabajo, para ganarnos la vida”, finalizó.