En los últimos años Bauleo no tenía un buen pasar económico, casi sin actividad artística y debió recluirse en la Casa del Teatro, lugar donde se refugian los actores que no tienen mayores recursos y que se encuentran olvidados de las marquesinas.

El actor popularizó su carrera con el personaje de Tiburón en “Los Superagentes” junto al recordado Julio De Gracia (Mojarrita) y Víctor Bó (Delfín), participando en los nueve filmes de la saga.

A lo largo de su trayectoria actuó en más de 50 películas, entre las que se encuentran: “Gitano” con Sandro, “Canuto Cañete detective privado” con Carlos Balá, “Los mochileros” con Susana Gimenez, “La cigarra está que arde”, “La clínica del Dr. Cureta”, “Yo gané el prode y ud...?” y “La vida continúa”, entre muchas otras.

En televisión fue actor de reparto en tiras “El coraje de querer”, “Abuelo 2000”, “No hay 2 sin 3”, “Son de fierro” y, en su última participación, en “Todos contra Juan” (2010).

Mientras que en teatro tuvo una carrera intensa en obras de la talla de “El burlador de Sevilla”, “El cartero del rey”, “La doncella prodigiosa”, “Tartufo”, “Así es la vida”, “Donde duermen dos duermen tres”, “La nona”, “Usted viene por el aviso” y “El conventillo de la Paloma”.

“Mateo”, “Aeroplano”, “Flor de pito”, una revista de Gerardo Sofovich, y la última “Póstumos” de José María Muscari, fueron obras que también contaron con su presencia.

En los últimos meses filmó la ópera prima de Andrés Paternostro, “La boleta”, aún no estrenada y de su residencia en Villa Giardino, Córdoba, se recuerda la organización del Festival Nacional de Tango de La Falda.

Víctima del abandono y de su salida de las grandes marquesinas, Ricardo Bauleo peleó duro contra una cruel enfermedad que finalmente lo venció en la Casa del Teatro, su lugar de residencia de los últimos tiempos.
Fuente: Télam