En la tarde de este viernes, personal del Departamento Operativo dependiente de la la Dirección de Inspección General de la Secretaría de Seguridad, Justicia Municipal y Control procedió a la clausura de un domicilio con un sector tipo taller de Rivadavia al 7900 por no contar con habilitación para la compra y venta de vehículos como así también por la ocupación ilegal del espacio público.

Adrián Alveolite, secretario de Seguridad, Justicia Municipal y Control mencionó que “desde el Estado Municipal, el Intendente Municipal Gustavo Pulti nos solicitó profundizar todos los procedimientos de inspección necesarios para desbaratar a las bandas que roban vehículos en nuestra ciudad. Para eso estamos intensificando las tareas de observación trabajando junto con la policía y la Fiscalía Provincial para detectar estos lugares donde se desarman los vehículos para luego introducirlos en partes en el mercado legal o ilegal de comercialización”

Alveolite destacó que “estos procedimientos ya nos permitieron realizar más de 50 intervenciones, disponer varias clausuras, secuestrar más de 6 toneladas de autopartes que sus tenedores no pudieron certificar la forma de obtención de las mismas, generar varias detenciones e imputaciones a sujetos que se encontraron administrando estos lugares y producir una tarea que antes el Estado Municipal no realizaba y que sin lugar a dudas importa una actividad que debemos combatir para evitar el robo automotor y poner tras las rejas a las personas que cometen estos delitos.”

Al proceder a la identificación de las unidades personal policial detectó que dos de los vehículos poseían perdido de captura por parte de la Justicia.

En el lugar, Eduardo Bruzetta, titular de Inspección General informó que “los inspectores del Departamento Operativo en forma conjunta a los efectivos de la Jurisdicción Segunda nos hicimos presentes en una vivienda de Rivadavia al 9700 donde se encontraron una gran cantidad de vehículos a la venta, algunos de ellos en aparente proceso de desguace en un terreno aledaño”

En esa línea, el funcionario explicó que “la actividad de compra venta en el lugar no está habilitada y además –tras las acciones realizadas por la policía- se detectó que dos de los autos tienen pedido de secuestro por parte de la Justicia por diferentes motivos.”

“Esto se encuadra en el marco de la verificación de las actividades comerciales que se realiza en el Partido de General Pueyrredon y en este caso directamente relacionado con la seguridad de los vecinos ya que se trata de automóviles que estarían a la venta con impedimentos legales”, concluyó.

Autos con pedido de secuestro de la Justicia Federal Criminal y la Justicia Civil Comercial

Por su parte, el titular de la Comisaría Segunda, Comisario Jorge Aguilar agregó que “los dos vehículos en cuestión tienen pedidos de secuestro judicial; por un lado un BMW con secuestro activo por parte de un Juzgado Federal Criminal y Correccional de San Isidro y un Renault Clio con embargo prendario solicitado por un juzgado civil y comercial local”

“Los vehículos fueron incautados puestos a disposición de la Fiscalía 20 y se inicia una causa por encubrimiento al titular de la vivienda que se encuentra en la condición de demorado”, concluyó.

Los automóviles secuestrados fueron trasladados por grúas de Tránsito Municipal hasta la Comisaría de Castelli entre Tucumán y Buenos Aires.