Los goles del equipo argentino fueron convertidos por Ricardo Alvarez, a los 11 minutos del primer tiempo, y Lionel Messi, a los 30 del complemento.

La delegación argentina viajará el próximo lunes por la tarde hacia Belo Horizonte para instalarse en el complejo Cidade do Galo, donde estará durante toda la competencia.

El conjunto albiceleste ganó los dos amistosos que disputó antes de la cita mundialista, por 3-0 a Trinidad y Tobago el pasado miércoles en el Monumental y la victoria frente a Esloveniaen La Plata.

El partido comenzó siendo muy áspero por parte del equipo europeo, que venía de perder por 2-0 ante Uruguay en Montevideo, y a los 8 minutos el mediocampista Lucas Biglia sufrió una infracción que luego le provocó ser reemplazado por Hugo Campagnaro.

Pero a los 11, Ricky Alvarez robó un balón cerca de la defensa europea, avanzó unos pasos y sacó un zurdazo que hizo estéril la estirada del arquero rival.

Pese a estar en ventaja, Argentina reguló el trámite del encuentro, fue el claro dominador de las acciones, pero los jugadores evitaron entrar en algún roce, algo que los eslovenos -en especial Rotman- trataron que así no sea.

El delantero de Newell s, Maximiliano Rodríguez, casi aumenta la diferencia con un remate desde afuera del área que el arquero Belec tocó y el balón se estrelló en el travesaño.

El público tenía ganas de ver en cancha a Lionel Messi y así se lo hizo saber a Sabella en varios pasajes, pero el temor era grande al ver la vehemencia que los eslovenos ponían en cada cruce, algo que motivó el reclamo del técnico argentino en varias ocasiones.

Sin embargo, para el complemento “Pachorra” le dio rodaje a Messi, Di María y Agüero, éste último quien no pudo estar frente a Trinidad y Tobago por una gripe, y ahí se vieron los mejores pasajes de fútbol de Argentina, aunque prendiendo alguna vela a los santos -o al Papa Francisco- para que nada altere los planes.

Rotación, movilidad, toques de primera y la subida de los laterales, fueron algunas de las variantes que exhibió en cantidad Argentina en ese pasaje del partido, con una Eslovenia que solo atinaba a cortar circuitos y casi a olvidarse de atacar.

Sobre los 30, Messi inició una jugada personal, con algo de complejidad cedió a Di María, este habilitó de manera magistral al “Kun”, quien de cabeza asistió al “Pulga”, para marcar el segundo.

Ya estaba todo liquidado con ese nuevo gol, aunque hubo tiempo para un remate de Di María que se fue cerca del poste derecho de Belec, y el tiempo para preservar las piernas.

El público despidió con aplausos a la selección en la fría y destemplada tarde de La Plata, para encarar el sueño de alcanzar nuevamente la gloria luego de 28 años.