El anuncio de la construcción de una Central Atómica en nuestra ciudad, se agrega al largo listado de “anuncios de color” de una conducción que ha perdido toda capacidad de dar respuestas concretas a las problemáticas de los argentinos y por supuesto a nosotros, los
marplatenses.

En enero pasado, se presentó el proyecto de la construcción de una Central Térmica al sur de Bahía Blanca que sería construida por la firma Siemens con una capacidad de generación de 580 megawatts, que resolvería el déficit eléctrico que afecta a Necochea y Mar del Plata– Batán.

Independientemente, también se anunció en junio de este año, la construcción de la línea que unirá Bahía Blanca con Vivoratá, que integrará definitivamente al sudeste bonaerense con el sistema interconectado nacional en 500 KV, según el anuncio.

A esto hay que sumar la promesa en el 2006 de repotenciar la Central 9 de Julio y la de Necochea, que hasta ahora no se ha cumplido.

La verdad objetiva es que a pesar de la recesión económica, todavía se recurre al corte rotativo en los barrios de Mar del Plata, Batan y Santa Clara del Mar para disimular la pésima política energética que desde los ´90 se aplica en el país y que en este caso le corresponde a la Gobernación de la Provincia la plena responsabilidad, por la privatización y extranjerización de los medios de generación, transmisión y distribución de la energía eléctrica, situación que nada
ha hecho para revertir.

El nuevo anuncio carece de seriedad alguna, cuando en Alemania se empiezan a cerrar las plantas generadoras termo nucleares por su alto riesgo, sin ningún estudio de factibilidad y con alegre irresponsabilidad se anuncia la construcción de una planta nuclear ennuestra jurisdicción.

Ya desde nuestra Universidad dudaron que en esta región se cuente con el agua suficiente para el sistema de refrigeración, a lo que debemos agregar que se tuvo que recurrir a un
convenio con el Partido de Mar Chiquita por la que se habilitaron 70 pozos en su distrito para sostener el servicio de provisión de agua en nuestra ciudad.

Por lo visto, tanto el Gobierno Nacional, Provincial y Municipal tienen en claro la problemática energética, pero eluden su solución y evaden con anuncios que no van a cumplir y algunos de una extravagancia comparable al cohete a la estratósfera de Menem.

Las respuestas a esperar son la de repotenciar la Central 9 de Julio, solicitar la construcción de las líneas de Bahía Blanca y Villa Gessell que aportarían 632 KV. Y por otra parte, dar por terminada la concesión de EDEA SA del Grupo Multinacional Camuzzi, por ser un
fracaso más de la política energética que, en el marco de políticas nacionales se han desarrollado en la provincia de Buenos Aires.

La provisión de energía eléctrica de nuestra ciudad, y en especial en los períodos vacacionales, depende en gran porcentaje de motogeneradores (quema de combustible fósil), sistema que a un costo de 300 litros de Gas Oil la hora, es el que sostiene en forma constante la provisión de energía a los hogares y la producción marplatenses.

La prometida repotenciación de la Central 9 de Julio y la construcción de las líneas de Bahía Blanca y Villa Gessell deben ser la prioridad, por otro lado, los incumplimientos de la Multinacional Camuzzi dan la oportunidad a la Provincia para recuperar el servicio de distribución
para sí, todo otro anuncio no es más que una distracción que nos desvía de la solución de fondo.
Aclaración: La opinión vertida en este espacio no siempre coincide con el pensamiento de la Dirección General.