El Marquesado  y sus terrazas al mar Cuantas veces escuchamos la frase Mar del Plata crece hacia el sur y recorriendo precisamente el sur marplatense llegue a los límites mismos del Partido de General Pueyrredón, colindante con el de General Alvarado, a 39 kilómetros de la ciudad de Mar del Plata y a menos de 5 kilómetros de Miramar, donde están hoy las ruinas del balneario El Marquesado Terrazas al mar , como recuerdo decian las publicidades allá por la decada de los 70 de un lugar que pintaba una onda country , un barrio privado con balneario propio en las afueras de Mar del Plata, exclusivo y cerrado, lejos del mundanal ruido de los veranos marplatenses.
 
Pero esto lamentablemente no fué así, ya que el mar devoró hace tiempo sus muros de contención y el edificio principal, aquel dónde funcionó la administración, los vestuarios y baños, el restaurant, la confitería, etc hoy es una verdadera madriguera invadida por la mugre y la erosión del mar que esta destrozando cimientos, cielorrasos, paredes y pisos de un lugar que en cualquier ciudad turistica del mundo seria sumamente aprovechado.

Para los más jóvenes o aquellos que no lo recuerdan, el proyecto Marquesado realizado en los años 70 (en plena dictadura militar) eran tres grandes terrazas linderas al océano Atlántico, cubiertas con arena apisonada y sembradas de sombrillas y reposeras, todo conectado por dos gruesas escaleras laterales que descendían desde el imponente edificio hacia las playas en una edificación abierta a fuerza de dinamita sobre los acantilados y que llamaba la atención por su diseño novedoso y moderno.

En el deteriorado edificio , aun hoy se puede leer una placa que dice textualmente: “Estas obras han sido realizadas con el esfuerzo y la bendición de obreros y empresarios argentinos.
Constituyen una muestra de las posibilidades del país cuando se armonizan la imaginación, la audacia y la responsabilidad, con el fervor y la capacidad puesta al servicio de la comunidad.Expresamos nuestro profundo agradecimiento a los medios de información, instituciones, profesionales,trabajadores y a los que nos alentaron a confiar en nosotros. 27 de mayo de 1979” Si vamos a la historia del lugar, podemos decir que El Marquesado es el producto del decreto 2606/77 firmado el 15 de noviembre de 1977 por el Poder Ejecutivo de la Provincia de Buenos Aires por el cual se daba autorización a la realización del proyecto, Con la “bendición” del gobernador militar, Ibérico Manuel Saint Jean, y aunando los esfuerzos de varios empresarios, las obras dieron inicio hacia fines de 1976. Textualmente, decia “El Gobernador de la Provincia de Buenos Aires decreta: Artículo 1º: Apruébase el convenio celebrado entre la Dirección de Turismo y la firma Sierra Leona, Sociedad Anónima Comercial, Industrial, Financiera y Agropecuaria, por el cuál esta última cede en donación a la Provincia, y esta acepta, las instalaciones fijas y obras de infraestructura construida y en construcción del balneario El Marquesado.

Asimismo, casi enfrente, cruzando la ruta interbalnearia N°11, se levanta el barrio del mismo nombre que no alcanzó el grado de desarrollo que se pretendía en un principio, pero es un lugar excelente que, con un proyecto y una fuerte desicion politica, puede alcanzar niveles de excelencia por sus cualidades naturales.

Cuando ya la decadencia lo había alcanzado, los comentarios tambien dicen que entrados los años ’90 el predio costero fue alquilado para circunstanciales eventos y según dichos de vecinos de la zona sus terrazas, inútiles ya para albergar a turistas, fueron usadas para hospedar a tiburones y rayas en periodo de adaptación, antes de ser enviados al acuario de Temaiken, en la localidad bonaerense de Pilar.

En una nota muy interesante titulada: El Marquesado Ruinas y Rumores, de Fernando Jorge Soto Roland surgen algunos de estos datos e investigación y expresa sobre este lugar, dando una clara imagen de su actualidad: “Y allí está, tirado a la vera de la ruta 11. Pudriéndose.
Siendo atravesado por el óxido, el salitre y la acción de los hongos que, dueños ya de todo el complejo, señorean el sitio convertidos en el imaginario marqués que sigue custodiando su “marca” fronteriza, sabiéndose inútil y vencido”.
 
Ahora bien, más alla de la historia, los mitos, los rumores, la época nefasta en que se construyó, etc, etc , la realidad es que los marplatenses tenemos la obligación de proyectar una ciudad de aqui a 30 años y no podemos darnos el lujo de dejar al libre alvedrio un lugar como este que en cualquier lugar del mundo seria un polo de desarrollo turistico y comercial.
 
Y la verdad es que hoy podemos hablar del abandono del Marquesado , pero hay muchos otros lugares en ese sector de nuestra ciudad en similares condiciones no solo de abandono, sino de peligro constante de derrumbes y de inseguridad para marplatenses y turistas.
 
La ruta interbalnearia, los barrios y las playas entre Mar del Plata y Miramar merecen mayor atención y proyección por parte de las autoridades municipales y provinciales.

Y cuando hablamos de atención lo decimos desde el convencimiento que se deben profundizar las tareas para llevar y mejorar el asfalto, el gas y las redes cloacales a los barrios del sur, se debe insistir con la creación de la autovia Mar del Plata-Miramar, se debe exigir a la provincia que genere escolleras para recuperar playas y evitar la permanente erosión de los acantilados en todo el sector, se debe pensar en que prevenir es mejor que lamentar y hay que derrumbar ya construcciones sumamente peligrosas para la vida de las personas, se deben crear barandas y colocarlas en los acantilados y miradores o playones para los pescadores con medidas de protección básicas, crear y mejorar bajadas, etc.
 
No todo es llamar a licitación y cobrar un canon, los marplatenses necesitamos proyectar, programar y ejecutar políticas a corto y largo plazo para nuestra ciudad con un fuerte contenido no solo turistico , sino comercial e industrial en el sur marplatense.
 
Seria muy bueno y saludable para nuestra comunidad que algun día todos los candidatos a cargos electivos se den cuenta que la mejor manera de hacer campaña política es ocupandose de las cosas importantes y que pueden generar empleo para nuestra gente en una ciudad en que la desocupación va creciendo día a día.

El Marquesado es un claro ejemplo de la desidia, la negligencia , el abandono y la falta de una politica clara de desarrollo de las diferentes administraciones comunales y provinciales que han pasado a lo largo de estos años. Si queremos ver cambios , debemos comenzar por hacer algo distinto.
Aclaración: La opinión vertida en este espacio no siempre coincide con el pensamiento de la Dirección General.