Se trata del sector ubicado en la rambla, correspondiente a la playa Bristol, justo entre los dos lobos. Una postal típica marplatense que se ve empañada por la basura, los pastizales y la desidia de la concesión.

Según las autoridades municipales, esa playa corresponde “al sector del Hermitage”, pero extraña cómo, en plena temporada, se encuentra abandonada y en un estado deplorable.

Basura, restos de botellas, pastos crecidos, cercos de madera podridos, carpas con toldos destruidos y envases de fuegos artificiales que seguramente ha usado la Provincia para alegrar las fiestas.

“Desde el verano pasado que está así. En el invierno vaya y pase pero cuando arreglaron los balnearios de al lado, este ni lo tocaron. Lo peor es que es un cuadrado cercado, como si la gente no lo pudiera tocar”, denunció Rosita, vecina de la zona. “Creo que si nos dejaran pasar a nosotros antes que al señor este, la mantendríamos. mejor. Es una vergüenza”, agregó.