Tras visitar el entrenamiento vespertino del martes, la idea era estar nuevamente con el plantel de Luis Nicoletti en el único turno del día en el predio de Cadetes de San Martín, pero las inclemencias del tiempo lo impidieron.

De todas formas, después del mediodía se hizo presente en la Villa Deportiva de la ruta 88, donde estuvo observando las obras que se están realizando. Moyano puso los pies en la tierra y corroboró los grandes avances que se han dado en menos de una semana de trabajo, desde que comenzaron a remover la tierra.

Atento a todos los detalles, siguió atentamente las explicaciones de Walter y Alejandro Trubiano (los que están a cargo de las obras en la Villa) primero, luego del arquitecto Alejandro Gil y fue acompañado por el presidente Pablo Mirón, el vice primero Emiliano Montes y Diego Lasala.

Además de la cancha que se construirá para que juegue la Primera Local y entrene el plantel principal del Federal A, recorrió todas las instalaciones, de punta a punta de una Villa Deportiva que mostrará rápidamente sus cambios y que no parará con la renovación, para quedar a la altura de los mejores predios del país.

“Es un orgullo y también es parte de un sueño ver las obras que se empiezan a realizar en la Villa Deportiva de Alvarado. El proyecto se va a ir realizando paulatinamente, pero hay muchas ideas y muchas ilusiones. Tenemos un predio muy grande y con muchas posibilidades de hacerlo crecer y que ayude al crecimiento del club”, expresó el vicepresidente segundo.

Los arreglos comenzarán por la entrada. El jueves se empezará a modificar la fachada, donde se sacará la actual y se construirá un arco que dé la bienvenida a la Villa Deportiva del Club Alvarado, que tendrá el estacionamiento a un lado, el quincho del otro y las comodidades para que tanto los jugadores del club como los visitantes, puedan disfrutar de las instalaciones.

En el medio del recorrido, llegó Gustavo Gatti y se fundieron en un abrazo. Entre recuerdos, hablaron de las divisiones infanto-juvenil y como será el proyecto para los chicos, los que en el futuro tendrán que llegar a defender la camiseta de Alvarado.

La recorrida continuó en la sede social de Jara y Peña, donde saludó a mucha gente y compartió la reunión de Comisión Directiva con el resto de sus compañeros. Antes, mientras llegaban los otros integrantes, subió al gimnasio que lleva su nombre y estuvo jugando un “picón” con algunos chicos que había ahí. Ya en la sala de sesiones, tomó la palabra y subrayó que “este es un proyecto renovado, ya conocemos más respecto a cuando estuvimos la primera vez y me tuve que ir por cuestiones laborales. Definitivamente tenemos que ser un club serio, hay muchas cosas por hacer, y con Pablo (Mirón) conduciendo, tengo plena consciencia que vamos a llegar lejos”.

Respecto al rol que ocupa en esta oportunidad, aclaró que “no voy a interferir en las decisiones de ningún departamento. Lo que podré hacer es opinar, sugerir o dar algún consejo desde mi lugar de vicepresidente segundo. En la gestión anterior pudimos dejar el club en cero, quedaron obras. Por suerte los sponsors nos ayudan, confían en nosotros. eso nos permite hacer las obras que comenzaron en la Villa Deportiva y armar un plantel a la altura como el que está”, señaló Moyano.

Con mucha satisfacción por ver que “su” casa se empieza a poner en orden, Facundo Moyano vio que lo que el empezó a proyectar, se está llevando adelante de la mano de su gente de confianza, en quienes confió para sacar adelante una situación muy complicada.

Otra promesa cumplida

El miércoles por la tarde, los dirigentes de Alvarado terminaron de llegar a un acuerdo con las maestras del Jardín de Infantes del club y le saldaron la deuda que tenían de dos meses y el aguinaldo.

Además, lejos de quedarse con eso, Pablo Mirón y el resto de la Comisión Directiva, prometieron regularizar los aportes previsionales y de obra social para las docentes, cosa que no se pagaban.